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Siete sedes y ningún proyecto mantiene Morena en Durango

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VÍCTOR MONTENEGRO

En Durango el Movimiento de Regeneración Nacional como partido ha tenido siete sedes, aunque de todas ellas hasta el momento no se ha logrado consolidar un proyecto formal; uno que sea fuerte y pueda ser competitivo localmente, capaz de emular el triunfo que a nivel nacional llevó a Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de México.

Allá por los años 2012-2013, el primero de sus recintos en la capital del estado fue una oficina muy modesta; escondida dentro de un localito en una pequeña plaza comercial ubicada en avenida 20 de Noviembre. Aquella fue la franquicia que adquirió Gonzalo Yáñez del PT, para delegar a la maestra Mary Páez como encargada del nuevo changarrito, cuyo capital político era netamente del Partido del Trabajo.

Ya para finales de 2014, la delegación petista con camiseta de Morena se declaró imposibilitada para participar en las elecciones federales del año siguiente, argumentando no tener cuadros para candidatear en los cuatro distritos electorales. Fue entonces que a inicios del 2015 tomó las riendas Carlos Medina Alemán, quien llevó a los primeros candidatos morenistas a participar en una contienda.

Medina Alemán, en asamblea estatal fue después electo como dirigente formal de Morena e instauró inmediatamente la nueva sede del Comité Ejecutivo Estatal en calle Juárez, entre Aquiles Serdán y Negrete del centro de esta ciudad, justo frente a la delegación del Instituto Mexicano del Seguro Social. Sin embargo el novel partido tendría una nueva escisión con la llegada de Rosendo Salgado Vázquez.

El "sombrerudo de Tláhuac" arribó a Durango para ser el nuevo presidente y secretario de organización del partido en 2016, anunciando a su llegada que buscaría conciliar entre los diferentes grupos, pero ocurrió todo lo contrario. Entonces una sede más fue articulada en la colonia Fátima, de donde fueron expulsados debido a las quejas de los vecinos que denunciaron ruidosos y alocados bacanales, organizados por y para Rosendo.

Según se dijo, su estancia sería por el tiempo que durase el proceso electoral local que concluiría tiempo después del 5 de junio del 2016. Sin embargo, Rosendo Salgado permaneció en la entidad como amo y señor de Morena, trasladando el lupanar a la famosa casona ubicada sobre el bulevar Dolores del Río, a donde comenzó a llegar la avanzada de expriistas y todo aquel identificado con el hoy exgobernador, Jorge Herrera Caldera.

De ahí se derivó el triunfo arrasador de AMLO que con su empuje le dio el gane también a candidatas y candidatos a legisladores federales y locales. No obstante, a partir de entonces, los nuevos parlamentarios, ya con el poder que sintieron al ocupar sus cargos, comenzaron por su cuenta a jalar agua a sus propios molinos relegando poco a poco al "hombre del sombrerón".

En 2019 una elección más se dio en el estado para renovar las presidencias municipales, pero para Rosendo Salgado sus días de gloria estaban contados desde antes. La designación de un nuevo delegado confundió al electorado pues había dos comités ejecutivos, el de Dolores del Río y el que instaló Armando Navarro en calle 5 de Febrero. En esos comicios el efecto AMLO únicamente alcanzó para ganar una alcaldía, la de Gómez Palacio.

Entre conflictos de grupo tanto en el ámbito local como en el plano nacional, al final Morena se quedó sin delegado en Durango. La sede de 5 de Febrero se la agenció la senadora Margarita Valdez y al aferrado de Rosendo le prestaron, bajo promesa de pago por arrendamiento, un local en calle Hidalgo adelante de la X Zona Militar, desde donde permanece acuartelado para insistir en que sigue siendo el mero bueno.

El pasado lunes la séptima sede fue inaugurada por la alcaldesa de Gómez Palacio, Marina Vitela, y la presidenta de la Jucopo en el Congreso, Sandra Amaya. Juntas acuerparon a Adolfo Villarreal como la nueva cabeza de Morena. Rosendo lo descalificó argumentando que se encuentra bajo proceso judicial por haber certificado en 2019 ilegalmente y ante el IEPC a Armando Navarro, para que se le diera nombramiento como delegado.

Sentenció Rosendo que pronto convocará a una reunión a diputados y diputadas por Movimiento de Regeneración Nacional, para revisar las actividades y el resultado de su trabajo pues se deben a él y al partido. El pleito pinta pues para largo; empero, otra gran hecatombe se avizora de cara a los próximos procesos electorales, ya que son también muchos y muy variados los personajes que quieren ser, aunque de eso nos puede dar para escribir en una siguiente entrega de este espacio editorial o quizá hasta dos.

Twitter: @Vic_Montenegro

Escrito en: Contrapesos Rosendo, Morena, sede, Durango

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