Incendios en California, sin control
Los dos grandes incendios declarados más recientemente en el estado estadounidense de California seguían avanzando este martes a gran velocidad y totalmente descontrolados, en medio de una sequedad absoluta y unas temperaturas más altas de lo habituales.
En el norte del estado, entre Weaverville y Redding, el bautizado como fuego de Zogg, que se inició el domingo por la tarde por motivos aún bajo investigación, ya se ha cobrado tres víctimas mortales, ha destruido 146 edificios y arrasado 16 mil 315 hectáreas en menos de 48 horas.
Según los últimos datos del Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California (Cal Fire), los 700 bomberos que trabajan en las tareas de contención aún no han logrado ningún avance significativo y prevén una jornada difícil este martes a causa del viento, el calor y la poca humedad.
Unos 370 kilómetros al sur, en las regiones vinícolas de Napa y Sonoma, otro gran incendio declarado también el domingo amenaza las inmediaciones de Santa Rosa, la mayor ciudad del conocido como "país del vino", y los bomberos tampoco han logrado ninguna contención.
Este fuego, bautizado como Glass, ha destruido 80 edificios y quemado 14 mil 664 hectáreas, y en él trabajan más de un millar de bomberos que tienen como prioridad su flanco occidental, para evitar que las llamas se acerquen más a la ciudad.
Impulsado por los fuertes vientos, el incendio había triplicado sus dimensiones en la noche del lunes al martes y había obligado a desalojar la totalidad de la población de Calistoga, de cinco mil 200 habitantes.