Historias de la creación del mundo.
El Creador no podía dormir.
Se pasaba las noches en vela, dando vueltas y vueltas en el lecho.
Durante el día tampoco la pasaba bien.
Andaba pensativo siempre; se le veía inquieto y desasosegado.
El Espíritu le preguntó:
-¿Qué te sucede? ¿Por qué no duermes por las noches? ¿Por qué piensas y piensas todo el día?
Con tono de congoja respondió el Señor:
-Es que la cebra me preguntó si es negra con rayas blancas o blanca con rayas negras, y no sé qué contestarle.
¡Hasta mañana!...