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La Raya del Tigre

En la batalla contra el COVID-19 estamos fallando todos, sin excepción

LA RAYA DEL TIGRE

En la batalla contra el COVID-19 estamos fallando todos, sin excepción

En la batalla contra el COVID-19 estamos fallando todos, sin excepción

RUBÉN CÁRDENAS

Y con justificada razón, en Durango retrocedimos en el semáforo epidemiológico: del amarillo regresamos al naranja, aun cuando en la práctica difícilmente habrá disminución de las actividades no esenciales, ya que la situación económica tan frágil transformó todo en esencial, desde salir sólo al supermercado hasta retomar las actividades comerciales en pleno e incluso las sociales, lo que ciertamente ayudó a reactivar la economía, pero, por otro lado, causó un incremento notable en los contagios.

La urgencia por trabajar y recuperar algo de lo perdido durante el confinamiento ha sido una prioridad, junto con evitar enfermarnos, pero son cada vez más aquellos que prefieren arriesgarse y salir, con tal de generar los indispensables recursos. Así, se comenzaron a abrir los negocios, de manera tambaleante - aunque decenas ya no sobrevivieron- primero en horario limitado y luego ya en turno normal; los clientes empezaron a aparecer y ya hubo más gente (y dinero) circulando, como sucede hasta hoy, para beneplácito de los desesperados dueños de negocios y para susto de quienes llaman "irresponsables" a los que andan casi en la normalidad.

Y, entre los que todavía se resisten a salir como antes y los que están saliendo incluso más que antes, todos somos responsables de lo que estamos enfrentando hoy, sea en menor o mayor grado. Esos 280 casos nuevos del sábado, la cifra más alta desde el comienzo de la pandemia, son resultado de lo que estamos haciendo como sociedad o lo que estamos omitiendo en cuanto a los protocolos sanitarios, cada vez practicados con menos rigor.

Junto con otras seis entidades, Durango quedó nuevamente ubicado en el semáforo naranja, lo que significa un descenso en la movilidad, pero será muy complicado impedir o reducir las actividades permitidas hace apenas pocas semanas. Es decir, los sectores empresarial y comercial difícilmente accederán a un nuevo cierre, aunque sea parcial, ni la sociedad estaría dispuesta, por lo que se observa, a que se restrinja de nuevo el acceso a diversos espacios públicos, menos a confinarse en el hogar, como en meses anteriores.

En la Ciudad de México, por ejemplo, se mantiene el semáforo en amarillo y están abiertos de manera normal los gimnasios, el boliche, los centros comerciales, las estéticas, los parques, los bares y restaurantes, todo sin restricciones. En Sinaloa, que también volvió al semáforo naranja, continuarán con su actividad comercial y turística, igual que cuando estuvo en el semáforo amarillo.

Ahora bien, si la pandemia sigue fuera de control no se debe a la responsabilidad exclusiva de un solo sector; ni de la sociedad, como algunos opinan, como tampoco del gobierno o de los comerciantes. Todos hemos contribuido en que los casos positivos se sigan incrementando día a día y la suma de estas omisiones o errores se está reflejando en una preocupante realidad diaria.

El manejo de la pandemia por parte del gobierno, por ejemplo, se politizó desde el inicio, hace más de siete meses y la sociedad se hastió de falsos picos en Mayo, Junio, Julio, hasta llegar a Octubre, sin que haya claridad sobre cuándo fue o cuándo vendrá ese famoso pico; también cansaron las versiones contradictorias entre autoridades estatales y federales. La difusión oficial de la información diaria se volvió inverosímil y, en gran medida, la ciudadanía se alejó de las recomendaciones sanitarias más elementales.

Hoy en día, es innegable que existe un relajamiento casi total de todas las medidas preventivas impuestas por las autoridades sanitarias durante el periodo de reapertura de las actividades no esenciales; entonces, la vida continúa casi como si ya hubiera pasado la pandemia, excepto por el pequeño detalle de que las cifras suben y todos tenemos uno o más casos muy cercanos.

Y hay quienes están muy ajenos a la responsabilidad de cuidarse y cuidar a los demás. Con tristeza nos enteramos hoy de figuras de la política local que, aun cuando estaban entre los casos sospechosos, se atrevieron a realizar fiestas de cumpleaños y otras conmemoraciones, cuando eso no era indispensable. De la misma manera, otros sectores sociales no han sido prudentes al organizar eventos de más de cien personas, ignorando las advertencias de las autoridades correspondientes.

Por todo esto, es necesario cambiar la estrategia en el tratamiento de la pandemia, comenzando por el modelo de comunicación diaria. Por altas que sean, las cifras ya no despiertan interés ni causan asombro ciudadano, sobre todo si no hay una explicación de por qué bajan los casos positivos en determinada región del estado sin que se haya hecho algo especial para cambiar esa tendencia o por qué disminuye el número de pacientes en camas de hospital, mientras el número de contagios se multiplica.

Los 280 casos positivos registrados este sábado y los 201 de ayer advierten que estamos haciendo las cosas mal todos y debemos cambiar; no es tiempo de culparnos unos a otros, sino de aceptar que si nos mantenemos como hasta hoy, podríamos alargar la batalla contra el flagelo del coronavirus.

COLMILLOS Y GARRAS

LA INFORMACIÓN DADA a conocer a medias por la Fiscalía Anticorrupción estatal en el sentido de que obtuvo, por parte de un juez de control, una orden de captura en contra de un exfuncionario municipal, presunto responsable del desvío de 150 millones de pesos durante el desempeño de sus funciones oficiales, causó un enorme revuelo en círculos políticos y sociales... TRASCENDIÓ QUE SE trata de un exservidor público de Gómez Palacio, de quien seguramente pronto se dará a conocer la información complementaria por parte de esta entidad responsable de investigar la corrupción en el estado de Durango, que encabeza Héctor García Rodríguez... ENCOMIABLE LA ASISTENCIA que elementos de la Dirección Municipal de Seguridad Pública le dieron la madrugada de ayer a un joven que pretendía arrojarse al vacío desde el denominado "Puente Negro" en esta ciudad; la intervención de los elementos policiacos impidió la pérdida de una vida. Ahora se le debe prestar apoyo sicológico.

Twitter @rubencardenas10

Escrito en: LA RAYA DEL TIGRE casos, estamos, semáforo, actividades

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