Bélgica cerrará todos sus comercios "no esenciales" durante un mes y prolongará las vacaciones escolares hasta el 15 de noviembre para tratar de frenar los contagios por Covid-19, según informaron medios locales.
Las profesiones de contacto no médicas, como las del ramo de la peluquería, también tendrán que cesar sus actividades, según diversas fuentes citadas por la prensa belga.
Está previsto que el primer ministro belga, Alexander De Croo, comparezca ante la prensa para explicar las nuevas restricciones tras una reunión con las autoridades políticas regionales.
Estas medidas reforzarían el toque de queda nocturno y el cierre de la hostelería y las actividades culturales y deportivas ya clausuradas para tratar de contener los contagios que siguen creciendo en Bélgica, aunque a menor ritmo.