Los huachicoleros parecen retar al gobierno federal, mientras Petróleos Mexicanos (Pemex) ha reconocido que cada vez es más complicado reducir el robo de combustibles, porque "son muchos los ductos y nos pican en lugares más complicados".
Aunque autoridades gubernamentales, entre ellas el director de la petrolera, Octavio Romero, desestiman la ordeña en ductos para extraer principalmente gasolinas, diesel y gas licuado de petróleo (LP), los huachicoleros se han dedicado a aumentar la incidencia de ese delito.
Durante los últimos tres meses, la delincuencia organizada dedicada al robo de combustibles aumentó 55.7% el número de perforaciones ilegales, al pasar de 708 en julio a mil 103 en septiembre pasado. De acuerdo con la Gerencia de Estrategia y Sistemas de Seguridad y Monitoreo de Pemex, septiembre se convirtió en el mes con el mayor número de actos ilegales en ductos de la petrolera durante 2020.
De esta forma, en los primeros nueve meses del año el número de tomas clandestinas suma 7 mil 842, lo que significa que la delincuencia no baja la guardia y realizó un promedio de 28.6 perforaciones por día en ese lapso.
Los números son más preocupantes en materia de tomas clandestinas de gas LP, pues en 2019 eran mil 305 y en los primeros nueve meses de este año sumaron mil 501.