Ya inició el proceso electoral de 2021, por lo que considero pertinente darles a conocer a mis compañeras y compañeros de Acción Nacional el pensamiento político del ilustre fundador del Partido, ¡viejas voces reencendidas!: en 1970 don Manuel Gómez Morín concedió su última entrevista al periódico Excélsior, en la cual pronunció las palabras con las que encabezo este artículo. Ciertamente es una revolución más profunda y más humana que la lucha armada; esto implica un cambio en el orden social. Dice la Real Academia de la Lengua Española: "Revolución significa un cambio profundo, generalmente violento, en las estructuras políticas y socioeconómicas de una comunidad nacional". Una de las acciones primordiales de la acción política es combatir la desigualdad, fruto de un crecimiento económico injusto: en México más del 60 por ciento se trasmite de una generación a otra, revela un estudio del Colegio de México (Colmex. 28 de febrero 2020). Agrego: pobre naciste, pobre te quedas. Mayores problemas de desigualdad tendrán en el país los pobres como consecuencia del coronavirus. La Comisión Económica para América, que es una de las cinco comisiones regionales de las Naciones Unidas, el 19 de mayo de 2020 informó que este año sesenta y cinco millones de mexicanos estarán en pobreza, de ellos, nueve en pobreza extrema.
Comentan quienes le abrieron las puertas del poder político a Andrés Manuel López Obrador que "lleva al país al desastre", entre ellos militantes del PAN, sin embargo, no olvidemos que el pasado neoliberal corrupto y la impunidad crearon las condiciones para que él llegara al poder. Es explicable la reacción colectivista, es el extremo opuesto del liberalismo individualista. El colectivismo encomienda en forma exclusiva la economía a la autoridad política; el liberalismo es ante todo la exaltación del individualismo, proclama la absoluta libertad para la industria y el comercio, sin ningún tipo de trabas por el Estado. En el trascurso del siglo veinte y lo que va de éste, la ideología liberal ha sufrido en lo económico la dura prueba de la realidad: la miseria del pueblo, a esta situación social tan delicada deben añadirse las crisis económicas, cada vez más graves y frecuentes. Don Efraín González Luna, cofundador del partido dio la voz de alerta: "Las tesis del liberalismo económico, cuya vigencia, por lo demás imposible, solamente seguirá engendrando injusticas, violencias y choques sin fin". (Humanismo político, p 289).
En la historia que estamos viviendo y que estamos haciendo en Acción Nacional, muchos piensan y hablan con desprecio, y en ocasiones con cierta pedantería, de lo que hicieron los que vinieron detrás de nosotros, se olvidan de las ideas primigenias por las que lucharon y despertaron la conciencia colectiva; fue una resurrección de las energías espirituales que dan sentido a arriesgar la vida misma por el bien común. Por tanto, el debate se debe centrar en la defensa de los Principios del partido, el partido sin los principios es nada, entre ellos, los relativos al manejo de la economía; dice la página 23 de la Doctrina del PAN. Trabajo: "...La justicia en las relaciones económicas no pueden ser resultado ni de pretendidos procesos automáticos (como sostiene el liberalismo) que en la vida diaria real puedan resultar factores de injusticias y cómplices de la prepotencia económica".
Hablemos sobre la reivindicación de la política: "Sólo la Ley puede erigir una barrera contra el neoliberalismo, sólo el Derecho, sólo la primacía de la política sobre la economía. Ningún llamado a la conciencia, lección de ética, ningún ruego tendrá el menor resultado. Hay que confiar en la política". Este párrafo no es de mi autoría, lo encontré entre unos papeles viejos y no anoté el nombre del autor. ¡Cuidado con las ideologías!, son un conjunto de ideas con los que grupos políticos justifican sus intereses económicos y de poder. Hay el riesgo que la izquierda ideologice la pobreza y su manipulación política y que termine en una dictadura, como lo demuestra la historia; la derecha es experta en el manejo de las ideologías que conllevan a gobiernos autoritarios comandados por el poder económico. Para luchar contra ambas tendencias es necesario volver a la memoria histórica del PAN, pues la política sin memoria, como diría Carlos Marx, es tragedia y es comedia, porque se repite.
Termino con una frase parecida a la de Gómez Morín sobre la revolución real, decía John F. Kennedy: "Quienes hacen imposible la revolución pacífica, harán inevitable la revolución violenta."