Editoriales

El traidor y sus secuaces

El menos común de los sentidos

EDUARDO RODRÍGUEZ

Con un recorte de 182 mil 937 millones de pesos para los estados y municipios fue aprobado el Presupuesto de Egresos de la Federación para el próximo año, donde le quitó dinero a salud, a la educación, a la inversión pública y todo para destinar mayores recursos al Tren Maya, Refinería Dos Bocas y el Aeropuerto de Santa Lucia, así como los esquemas asistenciales que hay que decirlo: los programas sociales no votan.

Es difícil de comprender cómo el Gobierno Federal encabezado por López Obrador ha dejado de lado la atención a la salud cuando somos uno de los países que mas muertes ha tenido por Covid-19; sin embargo, nada sorprendente ante la ineptitud demostrada por él mismo y su gabinete.

El Presidente nos ha mentido en la cara al señalar que la extinción de los fideicomisos se daba con el afán de destinar ese recurso en apoyos al sector salud. Dicha afirmación resultó falsa ya que estos recursos además de los 33 mil millones de pesos que se retiraron del Fondo de Salud para el Bienestar no fueron reasignados en el presupuesto del próximo año; apenas se añadieron 12 mil millones de pesos, es decir, ni la mitad de lo que le quitaron hace algunas semanas. Por si fuera poco, no hay recursos etiquetados para la adquisición de la vacuna contra el Covid-19 en cuanto esta salga al mercado.

En medio de la recesión, el presupuesto para proyectos de inversión creció 93.1 por ciento, pero por "proyectos de inversión" no me refiero a la construcción de obras que detonen el desarrollo regional; tampoco tramos carreteros, mucho menos obras "ancla" como la presa "El Tunal II"; nada de eso: el dinero va destinado a las obras faraónicas mencionadas al inicio, mismas que han sido cuestionadas desde su concepción porque no hay evidencia de su viabilidad, rentabilidad y capacidad para ser un motor de crecimiento y reactivación económica. Imagine usted: anualmente se aprobaban entre 100 y 150 proyectos carreteros que mejoraban la conectividad en el país; actualmente el PEF2021 solamente contempla ocho. Se antepone la construcción de una refinería que se ha inundado más de tres veces en lo que va del año.

Pemex recibirá 4.1 por ciento más recursos mientras sus pérdidas crecen y su deuda se vuelve más costosa. En el 2021 se destinará un 24 por ciento más de recursos, 28 mil millones de pesos aproximadamente, solamente para pago de deuda. Ese recurso es casi el 100 por ciento de lo que llegará a Durango. ¿Le parece justo? La tendencia es apostarles a las energías limpias, pero López Obrador sigue con la terquedad de "rescatar Pemex".

Lo que sí tendrá más presupuesto son los programas clientelares de la 4T; resulta lógico e incluso predecible al saber que el siguiente año se llevará a cabo el mayor proceso electoral en la historia de México. No obstante, habrá que dejarle claro a los abyectos diputados y diputadas de Morena, que los programas sociales no votan y menos los creados por la actual administración. Carecen de sentido social que se potencia por la falta de experiencia que han demostrado los operadores de los mismos, por lo menos aquí en Durango.

Si los programas sociales votaran el PRI de Enrique Peña Nieto con Prospera jamás se hubiera ido a tercer lugar. Prospera fue un programa reconocido a nivel internacional, porque no se dedicaba solamente a "regalar dinero"; era un programa de inclusión social el cual tenía la interacción de diversas dependencias como la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Secretaría de Educación Pública (SEP), la Secretaría de Salud, el IMSS, etcétera y su mayor logro fue crear la corresponsabilidad de las y los beneficiarios, ya que para recibir el apoyo debían cumplir con acciones familiares, enviar a sus hijos a la escuela y acudir a sus citas médicas. Además, contaban con una figura de contraloría social, donde las vocales que se encargaban de supervisar la corresponsabilidad eran parte de las propias beneficiarias. Con todo y eso, el pueblo castigó al gobierno de EPN y perdió.

Ante la desaparición de programas sociales que, si bien eran perfectibles, tenían una historia, tradición y permanencia, así como una metodología acreditada y sustentada con reglas de operación; ahora ver sus programas como Jóvenes Construyendo el Futuro, Sembrando Vida, etc. que están carentes de metodología y mecanismos de seguimiento no debería darles tantas esperanzas. Los súper delegados, funcionarios federales, así como los diputados y diputadas de Morena han demostrado que no tienen otra cosa en mente más que ser candidatos el próximo año, pero se les olvida que para llegar a ser hay que merecer.

Que quede claro: el presupuesto para nuestra entidad del próximo año es escaso, no cumple para satisfacer con las necesidades que atraviesa la sociedad duranguense a causa de la crisis sanitaria y económica y lo único que demuestra su aprobación es que el traidor y sus secuaces se salieron con la suya. El próximo año hay elecciones y Durango merece más.

@eduardguezh

Escrito en: El menos común de los sentidos programas, próximo, recursos, sociales

Noticias relacionadas

EL SIGLO RECIENTES

+ Más leídas de Editoriales

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas