Responsabilidad cívica
La pandemia de Covid-19 que vivimos y sufrimos en el país desde que se contabilizó la primera persona fallecida en marzo, está retomando fuerza en esta temporada. Esto se debe principalmente a la dinámica social, cultural y religiosa que tenemos en nuestro país.
La mayoría de la población en México celebra festividades religiosas en esta época del año, además de que es la preferida para realizar convivios y reuniones entre familia y amigos. Lamentablemente este diciembre será distinto a los de años anteriores y todos tendremos que adaptarnos a una nueva realidad que incluye el cierre de establecimientos en donde antaño se realizaban convivios, y tomar conciencia para cuidarnos más en esta época decembrina.
A raíz de la declaratoria del semáforo rojo en la entidad desde hace varias semanas, el gobierno estatal decretó medidas que reducen la movilidad de la población y la disminución de la actividad económica, obligando a los negocios que no se consideran esenciales a limitar los aforos y el tiempo de atención al público.
Además, la semana pasada el Congreso local aprobó una ley que obliga a la ciudadanía a el uso del cubre bocas como una medida de prevención para evitar el contagio de Covid-19. Todas estas medidas son destacables, a estas alturas de la pandemia cualquier esfuerzo que se haga debe de ser bienvenido, sin embargo, la conducta con responsabilidad cívica de los ciudadanos puede ser la mejor arma para evitar la propagación del virus en esta temporada de festividades religiosas y de reuniones sociales y familiares.
Con los más de 100,000 muertos y más de un millón de personas contagiadas que tenemos a nivel país por la pandemia, con la falta de coordinación entre los distintos niveles de gobierno respecto a la estrategia de comunicación, con las niveles de ocupación que tenemos en hospitales públicos, ya cercanos a la saturación, con las tasas mortalidad de pacientes intubados en hospitales, que es extremadamente alta, lo que queda es esperar que los ciudadanos tomen conciencia que su comportamiento es vital para evitar la propagación del virus en esta época, en que tradicionalmente existen más reuniones y eventos sociales que en otras épocas del año.
Independientemente de las medidas que puedan dictar las autoridades y que en estos momentos son necesarias para evitar la propagación del virus, es indispensable que la población en general y ciertos sectores como los jóvenes en particular, entiendan que es necesario cambiar nuestras dinámicas sociales, aún a pesar de que llevamos muchos meses sin realizar nuestras actividades cotidianas de la manera en que previamente lo hacíamos, es necesario que hagamos conciencia que la medida más eficaz para romper la cadena de contagios será limitar los encuentros sociales, las reuniones con un número elevado de personas y tratar de mantener las reuniones en lugares abiertos o con buena ventilación, además de que las reuniones tengan una menor duración que antaño.
En esta temporada decembrina, la mejor arma contra la diseminación del virus es la decisión que cada ciudadano tome para mantener las reuniones sociales y familiares solamente con sus más cercanos, además de evitar asistir a eventos sociales en donde pueda existir un riesgo mayor de contagio. Cuídese y cuide a su familia.
Twitter: @jesusmenav