Historias de la creación del mundo.
El Señor hizo al hombre.
Le salió más o menos bien.
Seguidamente hizo a la mujer.
Le salió micho muy bien.
Los hizo el Señor con el fin de que crecieran y se multiplicaran.
Adán y Eva, sin embargo, no mostraban interés alguno en la multiplicación.
El Señor, entonces, ideó un procedimiento para interesarlos: puso en la bóveda celeste un gran disco plateado que lo llenó todo con su resplandor.
Inspirados por aquella visión maravillosa el hombre y la mujer se dieron al amor.
Ésa es la razón por la cual la Luna está en el cielo.
Ésa es la razón por la cual nosotros estamos en la tierra.