Busca Reino Unido desarrollar vacunas contra variantes
El gobierno británico anunció el viernes que planea trabajar con una farmacéutica alemana para desarrollar vacunas contra las variantes del COVID-19, en momentos en que las autoridades de salud pública piden nuevas herramientas para poner bajo control al virus a medida que muta.
Como parte del acuerdo, la firma alemana CureVac, con sede en Tuebingen, dijo que suministraría a Reino Unido 50 millones de dosis de las vacunas si son aprobadas por los reguladores de la nación y que produciría las vacunas en el territorio británico. El gobierno no dijo cuánto estaba invirtiendo en el proyecto.
El anuncio se produjo en momentos en los que funcionarios de salud pública de todo el mundo plantean inquietudes en torno a las nuevas variantes del virus que son más contagiosas o resistentes a las vacunas existentes. Mientras el virus muta, la mayoría de los cambios causan pocas preocupaciones, pero los científicos están supervisando de cerca esas mutaciones para asegurarse de que identifiquen rápidamente alguna variante más peligrosa.
"Aunque las vacunas que se están desplegando actualmente en Reino Unido parecen funcionar bien contra las variantes del COVID-19 que actualmente son dominantes en la región, el virus sigue mutando y es probable que nuestras vacunas tengan que adaptarse para seguir ofreciendo la mejor protección posible", dijo el subdirector médico de Inglaterra, Jonathan Van-Tam.
"Ser capaces de crear estas nuevas vacunas a gran velocidad permitirá a nuestros científicos adelantarse al virus como hacen cada año con la vacuna de la gripe", agregó.
Hace unos días, la farmacéutica GlaxoSmithKline dijo que planeaba invertir 150 millones de euros (181 millones de dólares) en los trabajos de CureVac para atacar las nuevas variantes del COVID-19 utilizando su tecnología del ARN mensajero. CureVac informó el viernes que su colaboración con Reino Unido apoyará tanto su trabajo con GSK como con la candidata a vacuna que está desarrollando con Bayer y que ya empezó con los ensayos clínicos en personas.
Reino Unido ha apoyado enérgicamente el desarrollo de posibles vacunas en su lucha contra el brote de COVID-19 más mortífero de Europa. El gobierno ha invertido más de 300 millones de libras (410 millones de dólares) en el desarrollo de vacunas y ha adquirido 407 millones de dosis de siete vacunas diferentes.