Corrupción en transportes, asunto 'viejo'
Vaya caso que tienen entre las manos la Fiscalía General del Estado de Durango (FGED) y la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción respecto a la venta ilegal de placas en la entidad.
Según declaraciones del mismísimo Lorenzo Martínez Delgadillo, subsecretario de Movilidad y Transporte del Gobierno Estatal, han detectado 170 juegos de placas que, se presume, fueron expedidas de manera irregular en pasadas administraciones. Aseveró que ya interpusieron la respectiva denuncia ante la FGED, que encabeza Ruth Medina Alemán.
Por su parte, la Fiscalía Anticorrupción emitió un boletín diciendo que "investiga red de corrupción en la asignación de placas de taxis. A la fecha se han recibido 12 denuncias por el delito de cohecho en el trámite de concesiones para el servicio de transporte público en esa modalidad, de las cuales 8 carpetas de investigación ya cuentan con auto de vinculación a proceso dictado por el juez de Control y otras cuatro serán judicializadas en los próximos días".
De manera que, al parecer, se tienen todos los elementos para encontrar a las personas responsables de estas anomalías y aplicar la sanción correspondiente si en realidad se quiere meter orden en este sector del transporte público, el cual, durante años, ha sido señalado de prácticas irregulares al amparo de la impunidad.
Por supuesto, hay concesionarios y choferes que ofrecen un buen servicio y en apego a la ley, pero en términos generales el gremio está muy desprestigiado.
La corrupción en el área de Transportes no es nada nuevo. La existencia de taxis "piratas" recorriendo la ciudad sin ser molestados por autoridad alguna es un asunto viejo. El hecho de que un juego de placas es repartido entre dos taxis "clonados" (uno con la placa delantera y el otro con la trasera) es cosa común, y tampoco nadie lo sanciona porque hay "acuerdos". El desempeño deshonesto de varios de los inspectores que un día y otro también piden "mordida" es un secreto a voces.
Desde septiembre del año pasado se dio a conocer que fue vinculada a proceso una funcionaria de la Subsecretaría de Movilidad y Transporte por el delito de cohecho, es decir, pedía dinero a cambio de autorizar las placas. Ahora, de nueva cuenta se habla de una mujer, sin precisar si es la misma u otra persona.
Lo que se puede deducir, y está más que claro, es que precisamente se trata de una red de varias personas al interior de la dependencia y, por lo tanto, se requiere de una investigación profesional y sin intereses personales o políticos de por medio para erradicar de raíz estas pésimas prácticas. ¿Será posible? Ya veremos los resultados obtenidos por ambas Fiscalías. Ojalá no sea un nuevo fiasco.
PUNTO Y APARTE.- La celebración del 14 de febrero brinda un poco de aliento a los comerciantes, quienes tienen la esperanza de mejorar las ventas pues el 2021 ha tenido un difícil inicio.
En años "comunes" este festejo implicaba un extraordinario repunte en los ingresos de diversos negocios, tales como las tiendas de regalos, las florerías así como los restaurantes, aunque, en general, todos los giros aprovechaban el día. Ahora, en medio de la pandemia de la Covid-19 y en términos formales aún en semáforo naranja, es probable que no se alcancen las mismas ventas pero siempre se conserva la ilusión.
Es muy probable que crezca exponencialmente la informalidad y en todas las partes de la ciudad haya vendedores de flores, peluches y otros artículos, situación molesta para los comerciantes formales, pues, en efecto, es una competencia desleal para ellos. Sin embargo, es entendible que ante una economía tan contraída como la nuestra, la gente salga a las calles con el anhelo de obtener algo de dinero, pues muchos aún siguen desempleados y sin la posibilidad de encontrar una fuente de ingreso a corto plazo ya que sigue aumentando la lista de empresas que cierran operaciones.
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