El desprendimiento de un glaciar en la cordillera del Himalaya se llevó a su paso una presa hidroeléctrica, edificios, árboles, animales y personas. El derrumbe provocó una gran avalancha de lodo y agua que barrió un distrito al norte de India, matando a 31 habitantes y dejando más de 170 desaparecidos durante la mañana del domingo 7 de febrero. Este desastre pone de relieve los impactos de la catástrofe climática y su origen en actividades humanas. En recientes años se han iniciado más de 150 litigios contra gobiernos de todo el mundo por inacción ante el caos climático.
El Gobierno de la India había sido advertido en 2014 que la catástrofe podía pasar. "Es una calamidad inducida por el hombre que ha sido provocada por la negligencia de las autoridades", advierte Javed Ali del Water Youth Net. El siniestro comenzó en 2016 cuando inició el Proyecto de Energía de Rishiganga, dentro de la Reserva de la Biósfera Nanda Devi. El aumento de temperaturas está provocando "más de estos grandes derrumbes de pendientes", advierten científicos entrevistados por Carbon Brief, organización que estudia la crisis climática.
Videos filmados con teléfonos móviles del momento de la avalancha y difundidos por redes sociales, muestran el desprendimiento del glaciar Nanda Devi y la repentina llegada de una gran columna de lodo y agua por el cauce de un río, golpeando con fuerza las laderas del valle, desbordando los ríos Alaknanda y Dhauliganga, arrasando el distrito de Charnoli, estado de Uttarakhand, región del Himalaya, la cordillera más alta de la Tierra, y destruyendo a su paso la hidroeléctrica de Rishiganga.
Otras avalanchas en 2013, corrimientos de tierras y derrumbe de edificios por intensa lluvia, causaron cerca de 7,000 muertos o desaparecidos, peregrinos hindúes que acudían a Uttarakhand para visitar lugares importantes para esta religión, y donde nace el sagrado río Ganges.
El 12 de diciembre de 2020, durante la conmemoración del quinto aniversario de la adopción del Acuerdo de París, por el cual 197 países convinieron limitar el aumento de la temperatura mundial muy por debajo de 2 °C respecto de los niveles preindustriales, con la meta puesta en 1.5 °C, Amigos de la Tierra Internacional advirtió que "las promesas o compromisos nacionales que son la columna vertebral del Acuerdo de París son insuficientes para mantener el calentamiento global dentro de estos umbrales de temperatura, y no tienen en cuenta la distribución equitativa de la responsabilidad entre los países. Los países desarrollados se han quedado bastante cortos en sus medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y proporcionarle a los países en desarrollo el financiamiento y la asistencia técnica acordada para mitigación, adaptación y para afrontar pérdidas y daños".
La activista Greta Thunberg sentenció en un video: "Seguimos acelerando en la dirección equivocada. Los cinco años posteriores al Acuerdo de París han sido los más calurosos jamás registrados".
En estos cinco años se iniciaron más de 150 litigios climáticos contra gobiernos de todo el mundo. Estados Unidos, Canadá, Alemania, Bélgica, Irlanda, Nueva Zelanda, son sólo algunos de los países cuyos Ejecutivos enfrentan demandas por inacción ante el cambio climático.
El 3 de febrero de 2021, en su sentencia histórica sobre el denominado "caso del siglo" en Francia, el Tribunal Administrativo de París reconoció la responsabilidad del Estado francés en la crisis climática y considera ilegal que incumpla sus compromisos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. El Estado es también responsable de "daños ecológicos".
La condena envía una advertencia a los gobiernos del mundo que enfrentan demandas por esta causa: la inacción ante el cambio climático es ilegal.
En Holanda, una sentencia del Tribunal Supremo condenó al gobierno por incumplir los compromisos de mitigación climática adquiridos y por violar los derechos de generaciones presentes y futuras.
En España, un litigio contra el gobierno por inacción ante el cambio climático se encuentra en el Tribunal Supremo desde septiembre de 2020.
A nivel mundial permanecen intocadas las causas estructurales de la catástrofe climática.
Las promesas incumplidas de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero ponen al planeta en camino de un catastrófico calentamiento de 3 grados Celsius o más este siglo.
Lo dicho: la justicia climática no vendrá de arriba.
@kardenche