Los transportistas de carga y de pasajeros de Perú iniciaron este martes una huelga nacional indefinida para exigir al Ejecutivo la devolución del total del impuesto al consumo, de un tercio de los peajes que se les cobra y que se combata al transporte informal.
El gremio del transporte terrestre interprovincial de carga y el de pasajeros (COTRAP-APOIP) comenzó una paralización que es acatado por todos los transportistas de carga, incluidos los de alimentos, y de pasajeros interprovinciales.
De momento, el mayor impacto de la protesta se presentó en regiones como la costera de Ica, al sur de Lima, donde los camioneros bloquearon la carretera Panamericana, así como en Arequipa y Cusco, la central Junín y la amazónica Loreto.
El representante del gremio de transportistas, Martín Ojeda, cuestionó la falta de respuesta del Gobierno a sus demandas y aseguró que esta paralización "afectaría seriamente no solo el traslado de los pasajeros, sino también de los productos de primera necesidad, provocando desabastecimientos en los mercados a nivel nacional".
"Sin embargo, nos sentimos defraudados por la falta de intención del Gobierno para solucionar nuestros requerimientos a favor y continuar con nuestras actividades económicas", aseguró en un comunicado.
Los transportistas rechazan el incremento del precio de los combustibles, exigen el reintegro del total del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) y que se les devuelva el 30 por ciento del sobreprecio que se cobra en los peajes "aún en rutas deterioradas".
Los huelguistas también remarcan que el Estado debe combatir el transporte informal de carga y pasajeros, y aseguran que esto es favorecido por la exigencia del Gobierno de que los pasajeros deban presentar pruebas de descarte de Covid-19 antes de viajar.