¿Qué es el escualano?

El escualeno no es lo mismo que el escualano. El primero es una sustancia que producen las células cutáneas para aumentar la humectación de la piel, pero su producción disminuye entre los 30 y 40 años haciendo que el rostro se vuelva más seco y propenso a envejecer. Este también se puede obtener de fuentes animales, como los tiburones, o vegetales, como la caña de azúcar, el olivo y el arroz.

Así pues, para reponer la pérdida de escualeno y combatir la piel tirante, se recomienda aplicar escualano. ¿Cuál es su diferencia? El escualano es apto para usarse en tratamientos cosméticos, pues no es más que escualeno que pasa por un proceso de hidrogenación para convertir a estas moléculas en unas más estables, gentiles con la piel y con mayor tiempo de vida.

¿Lo mejor? No es un ingrediente aceitoso o pesado, por lo que se absorbe rápidamente y, además de humectar, ofrece otros beneficios a la piel. ¡Conócelos a continuación!

LOS BENEFICIOS DEL ESCUALANO

Entre los grandes aportes del escualano (y por qué todo el mundo lo ama, incluyendo a nuestras celebs favoritas) es que restablece el equilibrio natural de la humedad de piel, haciendo que luzca mucho más hidratada y suave sin estimular la producción excesiva de grasa. De hecho, al ser tan liviano, antiinflamatorio y no comedogénico, es ideal para cutis grasos y con tendencia al acné.

Por otro lado, es un poderoso antioxidante que previene el daño de los rayos UV y la formación de manchas, al mismo tiempo que promueve la producción de colágeno para una piel más resistente al envejecimiento. También vale la pena mencionar que las pieles sensibles y atópicas lo pueden usar, debido a que reduce el enrojecimiento y la inflamación cutánea, aliviando síntomas del eczema, dermatitis, psoriasis y rosácea.

El paso número uno es consultar a tu dermatólogo para que te indique qué producto usar, cómo aplicarlo y cada cuánto. Esto hará que aproveches sus beneficios al máximo y no corras riesgo de sufrir efectos adversos. Sin embargo, si tu piel es normal, no presentas ninguna condición y deseas probar este ingrediente, puedes incluir su uso de forma progresiva para que tu rostro lo vaya aceptando. Comienza una vez a la semana, luego dos y así hasta que lo puedas emplear diario.

 TIP

Elige escualano derivado de caña de azúcar, puesto que no contiene triglicéridos (un componente del que se alimentan las bacterias) y es el más aceptable en la mayoría de los cutis