SALUM MUESTRA "MÚSCULO" NACIONAL
Es una realidad que hasta el momento quien ha recibido más apoyo de parte de personajes nacionales de su partido, es el panista Jorge Salum del Palacio.
Primero fue Marko Cortés, dirigente nacional del PAN, quien vino a Durango previo al debate para asegurar que Salum del Palacio contaba con todo el respaldo de su partido y que sería el ganador del ejercicio.
Después, fue la senadora Xóchitl Gálvez, quien incluso sacudió la agenda local al acusar al actual Ayuntamiento de malgastar recursos en las lámparas LED, situación que obligó al actual Ayuntamiento a moverse para responderle.
También estuvo en Durango Fer Doval, secretario de Estudios y Análisis de CEN del PAN, quien acompañó a un recorrido en campo al candidato panista y en gira de medios aseguró que incluso arrasaría en las próximas elecciones.
Es cierto que este tipo de apoyos poco influye en el electorado al momento de elegir su voto, sin embargo, también es un termómetro para darse cuenta (de acuerdo a sus números internos) quiénes tienen realmente posibilidades para lograr la victoria y quiénes de plano no merecen ni siquiera darse la vuelta para la "fotografía" oficial.
En los últimos días ha arreciado la guerra de encuestas y preferencias electorales en la capital, en las que hay un común denominador: Salum del Palacio es uno de los dos candidatos que encabezan las preferencias para llegar a la Presidencia Municipal.
"GUERRA SUCIA" DEL PARTIDO DURANGUENSE
La agresión de un brigadista del Partido Duranguense en pleno Centro Histórico de la ciudad, a plena luz del día, se hizo viral con el argumento que los responsables eran parte del equipo de campaña de José Ramón Enríquez Herrera.
Después, Movimiento Ciudadano (MC), exhibió al propietario del vehículo, negó que fuera parte de su equipo y levantó una denuncia contra los responsables de la agresión, exigiendo que cayera todo el peso de la ley.
Pero al final de cuentas, la dueña del vehículo apareció en diversos medios de comunicación y aseguró que fue su yerno quien agredió al brigadista por un asunto personal, debido a que fueron objeto de un fraude en la venta de terrenos y que el agredido, sintiéndose arropado por sus compañeros, se burló de los afectados, lo que terminó derivando en la agresión posterior.
Lo que es un hecho es que el Partido Duranguense ha dedicado su tiempo y esfuerzo en golpetear la campaña de Enríquez Herrera, pero se ha olvidado de proponer. La guerra sucia, a la orden del día.