La falla de San Andrés
Se ha cumplido un año del triunfo de Andrés Manuel López Obrador, quien después de tres intentos se convirtió en el Presidente Constitucional, aunque en los hechos se siga comportando como el Jefe de un Partido Político, alejado de su alta investidura y trascendente labor de asumir plenamente el liderazgo de los mexicanos desde la perspectiva de Jefe de Estado y de Gobierno, lamentablemente no ha sido así.
El presidente López Obrador, sencillamente sigue en vulgar campaña, falta al decoro de su alta investidura como Presidente; se comporta como un deleznable fajador, pendenciero y pandillero, jefe de partido o de pandilla; divide, genera encono, confronta a los mexicanos (entre fifís y chairos), ataca sistemáticamente la libertad de expresión, falta a la verdad y pone en grave riesgo el Pacto Federal.
A un año de su apoteótico triunfo y contrario a sus compromisos y promesas de campaña ha hecho del recorte presupuestal su mayor habilidad; recortó el presupuesto para carreteras, hospitales, sector educativo, acabo de tajo con las estancias infantiles, con PROSPERA, con el proyecto del Metrobús de la Comarca Lagunera, desapareció a Durango del Plan Nacional de Desarrollo, la CONAFOR que prometió se reubicaría en Durango no se ha cumplido (ni se cumplirá), despidió, al día de hoy, poco más de 11 mil burócratas (que puede hacerlo, pero nunca lo justificó).
A un año de su histórico triunfo, el Presidente le falta el respeto a la Nación y a los mexicanos y con sorna apabulla gobernadores (se calentó la asamblea), humilla funcionarios, descalifica a sus propios Secretarios de Estado, rebaja la autoridad moral de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y bajo el gastado argumento de la austeridad y combate a la corrupción amenaza la autonomía del Instituto Nacional Electoral (INE), desdibujó la Comisión Reguladora de Energía y desapareció el Consejo de Promoción Turística de México, la Comisión de Evaluación Educativa, pronto se apropiará del Consejo General Electoral del INE, para hacerse del control de los procesos electorales en todo el país, de orden federal o local, para volver a la antigua y anti democrática "Comisión Federal Electoral" del Carlos Salinas de Gortari y del ahora Director de la CFE y entonces Secretario de Gobernación y Presidente de la referida Comisión, Manuel Bartlett Díaz, a quién en 1988, de manera muy conveniente y delincuencial se le "cayó el sistema".
A un año de ese triunfo, que sin duda representó la esperanza para millones de mexicanos, las libertades civiles, políticas, de expresión, religiosas y económicas de los mexicanos, están amenazadas por la decisión de un "dedito" y la voz de un mesías que paso del régimen parlamentario al régimen de la "UNIVERBOCRACIA" y que ha hecho de las "consultas populares", la burla más descarnada de su ejercicio gubernamental, pues sin guardar las formas, los solemnidades constitucionales, metodológicas, estadísticas y éticas, toma decisiones con consultas a mano alzada de pequeñas minorías, que lo mismo opinan de aeronáutica, de reforma energética, que de un Metrobús.
En términos cuantitativos el Gobierno de López Obrador ha sido un verdadero fracaso y podemos afirmar que estábamos mejor en el régimen corrupto y corruptor de Enrique Peña Nieto, que en el Gobierno de la "4T" que promueve, hasta el cansancio, el combate de este mal que parece ser un quiste de los Gobiernos de MORENA y se protege al ex Presidente Enrique Peña Nieto. Observemos los siguientes datos;
En el primer trimestre del año la inversión extranjera directa cayó en un 3.02%, en el mismo periodo el consumo interno cayó un 1.54%, ya no hay becas para universitarios, no hay seguro popular, se frenó la construcción del nuevo aeropuerto y con ello se desalentaron las inversiones y cayo la recepción de turistas extranjeros, no hay tratamientos para el cáncer, no hay apoyo al campo, la gasolina y el gas escasean y es más cara, se incrementó el delito de secuestro, PEMEX paso a ser una empresa chatarra, aunque se rinda culto a la personalidad de Lázaro Cárdenas del Río.
En generación de empleos estamos peor; en mayo de 2019, se generaron 3,983 nuevas plazas de trabajo, contra 33,966 que se generaron en el 2018, lo que significó una caída del 88%, porcentaje verdaderamente histórico y doloroso.
De acuerdo a las cifras publicadas por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el primer trimestre de AMLO, los homicidios pasaron de 2,539 con Felipe Calderón y de 4,633 de Enrique Peña Nieto a 8,493 con López Obrador.
En materia de deuda pública, el austero Presidente firmó con 23 bancos (14 extranjeros) contratación de deuda por un monto de 8 mil millones de dólares, faltando a su compromiso de campaña de no contraer más deuda.
Reiteramos que no se está cuestionando la legitimidad de la elección, su triunfo era ineludible ante la podredumbre de los Gobiernos del PRI y las fallas de los Gobiernos del PAN, lo que se cuestiona son los decepcionantes resultados y peligrosas decisiones.
Sin duda, el sexenio de Don Andrés podría ser llamado como "La Falla de San Andrés".