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La Raya del Tigre

Se fue Urzúa y llega Herrera; AMLO debe corregir

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RUBÉN CÁRDENAS

La nota del día de ayer fue, sin duda, la renuncia de Carlos Urzúa Macías a la titularidad de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, lo cual provocó, en principio, un ligero descenso del peso frente al dólar y pérdidas en la jornada ordinaria de la Bolsa Mexicana de Valores.Después, vino una andanada de reacciones por parte de críticos del régimen y también declaraciones en apoyo al nuevo titular, Arturo Herrera Gutiérrez, cuyo nombramiento tendrá que pasar, casi como mero trámite, por un Congreso mayoritariamente morenista y a quien, desde inicios del sexenio, habían estado impulsado los empresarios y el sector financiero nacional e internacional para encabezar el trabajo en Hacienda.

A través de una carta que circuló ayer en medios de comunicación, Carlos Urzúa explicó que le había resultado inaceptable la imposición de funcionarios "que no tienen conocimiento de la Hacienda pública" y añadió que esto fue motivado "por personajes influyentes del actual gobierno, con un patente conflicto de intereses". Como principal razón adujo "discrepancias en materia económica, algunas de ellas porque se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento" y señaló que sus convicciones "no tuvieron eco", en lo que se comenzó a interpretar como un obvio distanciamiento del enfoque lopezobradorista en temas de recursos públicos.

Tras conocer las razones y aceptar la renuncia de Urzúa, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que "aplicar austeridad provoca rechinidos, incomprensiones y hasta titubeos, incluso dentro del Gobierno" y que se le dará continuidad a las medidas económicas, al tiempo que le dio su total apoyo a Herrera Gutiérrez.

Más allá de la controversia registrada por la forma en que Carlos Urzúa dejó la Secretaría de Hacienda, queda para el análisis si fueron totalmente de su autoría los absurdos recortes presupuestales que tanta polémica han provocado, si hubo presiones de otras fuentes o personas cercanas al presidente, como Alfonso Romo, o si sólo cumplió órdenes de su jefe para implementar cada restricción presupuestal.

El caso es que los pocos meses que estuvo al frente de la Secretaría de Hacienda, Urzúa se caracterizó por recortar el presupuesto en distintas áreas de gobierno con una tijera muy afilada y poca previsión de las consecuencias inmediatas. El cierre de las estancias infantiles provocó su primer gran escándalo en el país, aunque no se admitió que se tratara de un cierre como tal, sino de un "cambio en las reglas de operación". Y ese cambio resultó ser la propuesta de que ahora los abuelos cuiden de los nietos y a ellos se les dé el dinero directamente.

Después, siguieron los recortes al vulnerable y muy delicado sector salud; con esto, se volvieron todavía más escasas las medicinas en el sistema hospitalario del país, de por sí un área con muchas deficiencias desde siempre. Los pacientes de cáncer, diabetes y VIH han sido los más afectados con esto, aunque hay señales de que puede haber un replanteamiento en esa medida, con los resultados que saque el mismo López Obrador después de su actual gira por hospitales rurales en todo el territorio nacional, la cual comenzó en Chiapas. Y cuando se habla de salud, necesariamente se piensa en la renuncia de Germán Martínez Cáceres a la dirección general del Instituto Mexicano del Seguro Social, también por estar en desacuerdo con las nuevas políticas institucionales.

Como era de esperarse, los acérrimos críticos del gobierno salieron a escena durante todo el día para hablar incluso de fatalidades, como que se alejará la inversión extranjera o que el gabinete se está desmoronando. También hubo otras voces más moderadas, para urgir al presidente a que analice cada una de sus decisiones y "corrija el rumbo" lo antes posible. De hecho, "Corrija, señor presidente", fue la idea más posicionada en el ámbito mediático.

Ahora bien, tanto la renuncia de Germán Martínez como la de Carlos Urzúa han exhibido intromisiones y desavenencias al interior del gabinete de AMLO, por lo que es momento oportuno para valorar y ajustar lo necesario si se pretende evitar problemas de carácter político y financiero en el corto y mediano plazo.

Tal vez lo único bueno de la renuncia de Urzúa es que surge la oportunidad para subsanar los conflictos creados por los recortes presupuestales y que los sectores financieros ven bien la llegada del nuevo secretario. Y sí, es un buen momento para que las cosas cambien, independientemente de quien esté al frente de Hacienda. Nuestra economía no debe depender de un solo hombre, sea el secretario o el presidente.

 COLMILLOS Y GARRAS

EL DEPARTAMENTO DE Meteorología e Hidrología adscrito a la Comisión Nacional del Agua dio a conocer la posible llegada de precipitaciones pluviales, incluso muy intensas, en la mayor parte de las regiones del estado... UN TOTAL DE 61 mil 920 mil 44 hectáreas resultaron afectadas por los incendios forestales en Durango, cuyo número alcanzó los 244. Afortunadamente, por el momento no hay ningún incendio activo en el territorio estatal... FUENTES DE LA Judicatura federal sostienen que alrededor de treinta funcionarios del anterior sexenio siguen solicitando el amparo de la justicia federal, ante una eventual orden de detención en su contra. El año pasado los pedían cada semana y ahora cada mes, pero no ha desaparecido el temor, por lo que se ve.

Twitter @rubencardenas10

Escrito en: LA RAYA DEL TIGRE Urzúa, renuncia, Carlos, cada

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