Detectan rezago en agua potable
La ampliación de redes de agua potable para las comunidades del municipio de San Dimas es uno de los proyectos más ambiciosos de la administración 2019-2022, informó el alcalde electo, Jesús Alejandro Gurrola Romero.
Durante la campaña por la alcaldía, el mejorar el abasto de agua potable en las comunidades fue una de las peticiones más recurrentes de los electores, sentenció.
Explicó que además de las comunidades que aún no cuentan con el servicio básico, también es necesario atender aquellos poblados en los que el crecimiento demográfico ha significado el rezago de algunos domicilios en la cobertura de servicios.
De acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en el estado de Durango solo el 3.33 por ciento de las viviendas no cuentan con servicio de agua potable.
Esto significa que el 96.67 por ciento de los hogares en la entidad disponen de agua entubada hasta el interior del domicilio.
Sin embargo, el presidente municipal electo en el municipio de San Dimas refiere que el rezago en la región se estima en un 50 por ciento de las comunidades.
"Debemos de andar en un 50 por ciento, andamos muy mal", enfatizó.
Explicó que además de las limitaciones presupuestales que representa la dispersión geográfica del municipio, para ampliar las redes de agua potable se debe considerar la baja disponibilidad del líquido.
"Los pozos de agua tenemos que hacer de nueva creación, con más profundidad", apuntó.
De acuerdo al Sistema Nacional de Información Municipal, San Dimas está integrado por 283 comunidades en los cinco mil 483 kilómetros que lo conforman.
Esta superficie representa el 4.45 por ciento del territorio total del estado de Durango y debido a sus características se considera un municipio rural.
En el último censo que realizó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo (Coneval), se estimó que el 50.41 por ciento de los habitantes vivían en condiciones de pobreza y un 2.74 por ciento presentaba condiciones de pobreza extrema.
En el caso de la medición de vulnerabilidad por carencia en los servicios básicos, el Coneval estimó que el 40.82 por ciento de los habitantes de ese municipio requerían tener acceso a redes de agua potable, drenaje, saneamiento, energía eléctrica, entre otros.