Mediante una revisión a un vehículo que estaba por ingresar a la ciudad de Durango, personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y de la Policía Federal Preventiva (PFP) realizaron el decomiso de 313 aves que en su mayoría pertenecían a especies protegidas por la Norma Oficial Mexicana.
Aseguramiento
Paulino Córdoba Quiñones, delegado estatal de la Profepa, detalló que el cargamento de aves tenía como destino final Ciudad Juárez, Chihuahua, donde se planeaba comercializarlas y eran procedentes del estado de Nayarit; lugar de origen de las siete personas que fueron detenidas por no comprobar la legal posesión de los animales.
En el conteo de los inspectores de la dependencia federal se identificaron 250 ejemplares de la especie mexicana conocida como “perico atolero”, considerada dentro de la categoría de protección especial ; otros 36 ejemplares de la especie “loro occidental”, clasificada dentro de la norma NOM-059 como especie amenazada; había también dos ejemplares de la especie conocida como “perico frente naranja”, otra que se encuentra también amenazada.
En las jaulas se encontraban dos especies diferentes de la especie “agapornis”, cuyo hábitat y principal ecosistema se encuentra en el occidente de África, y sumaban 24 ejemplares; y un “loro peruano”, sobre el cual tampoco se comprobó su legal procedencia.
A las siete personas que fueron detenidas durante el aseguramiento se les siguió un proceso penal y actualmente se encuentran recluidas en el Cereso) de esta ciudad.