Moscú.- Estados Unidos prometió ayuda a Georgia para la elección presidencial del entrante enero y en los próximos días se discutirán los detalles, anunció hoy en Tbilisi el
subsecretario estadunidense de Estado para Europa, Lynn Pascoe.
Pascoe, al frente de la primera delegación estadunidense que visita Tbilisi tras el cambio de poder hace dos semanas, dijo que el presidente George W. Bush y el secretario de Estado, Colin Powell, ya han tenido contacto con los nuevos dirigentes y prometieron ayuda.
Subrayó en sus declaraciones a la prensa la necesidad de transparencia en los comicios presidenciales del 4 de enero próximo, y destacó que Estados Unidos no respaldará a ningún partido político, sólo a quien resulte electo por el pueblo georgiano.
"Todos los países civilizados apoyan a Georgia y están dispuestos a prestarle asistencia", dijo Pascoe, citado por la agencia de noticias rusa Itar Tass.
La fecha para las elecciones presidenciales en Georgia fue anunciada la semana pasada, tras la renuncia del ex mandatario Eduard Shevardnadze, forzada por una presión popular encabezada por los principales partidos de oposición.
La convocatoria tuvo lugar mientras la economía georgiana se mantiene en un colapso y sin recursos propios para los comicios.
Al respecto, el Consejo de Ministros de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), se comprometió la víspera a conceder más de seis millones de dólares a Georgia, para organizar las elecciones presidenciales.
El Movimiento Nacional y el Burdzhanadze-Demócratas forzaron el 22 de noviembre pasado la renuncia del entonces mandatario Eduard Shevardnadze, tras denunciar fraude masivo en los resultados de las elecciones legislativas del 2 de noviembre pasado.
Nino Burdzhanadze, lidereza del Burdzhanadze-Demócratas, tomó el poder y mantendrá la presidencia provisional hasta las elecciones.
En tanto, el líder del Partido Laborista de Georgia, Shalva Natelashvili, dijo que podría boicotear los comicios, porque "han sido convocados por autoridades ilegítimas".
"Si quienes llegaron al poder con el uso de la fuerza ganan las elecciones, Georgia enfrentará un colapso", dijo Netalashvili a la prensa.
Los laboristas, considerados la segunda fuerza política en Georgia, era uno de los grupos opuestos al ex presidente Shevardnadze, pero tampoco apoyó a las agrupaciones que forzaron su renuncia hace dos semanas.