Las acciones violentas de la delincuencia organizada durante el año 2008 se incrementaron en la entidad de una manera desproporcionada, acaparando las páginas de la prensa escrita y los espacios de radio y televisión locales. A la par, la labor de un segmento de los periodistas duranguenses se desarrolló entre amenazas, intimidaciones y fuego cruzado.
El año que recién concluyó fue diferente para Durango, la violencia se manifestó como nadie lo esperaba, hubo hechos de sangre que marcarán la historia.
Por lo anterior, los reporteros han vivido de cerca muchos capítulos complicados; su escudo, sólo las cámaras de video y fotográficas, grabadora, pluma y libreta.
Cifras
“Nunca estamos ni tan cerca como para sentir que estamos en zona de peligro, pero tampoco tan lejos como para estar a salvo”, expresó el camarógrafo Raúl Cruz, quien sabe del compromiso y profesionalismo que exige la carrera que eligió.
Los hechos criminales se elevaron de un año a otro de forma considerable, pues mientras que en 2007 se cuantificaron alrededor de 124 ejecuciones, en 2008 fueron más de 280; algunas de las cuales fueron encarnizadas.
Responsabilidad social
Por su parte un reportero de televisión destaca que a pesar de los capítulos fatales y riesgosos que se han vivido en Durango, no se ha dejado de manejar la información como ha ocurrido en otras entidades.