El filósofo griego Tales nació en la región de Mileto en Grecia. A Tales fue el primero al que se le dio el nombre de "sabio", de los siete famosos sabios de Grecia.
Este pensador aprendió geometría de los egipcios, e inventó el triangulo rectángulo en un semicírculo. Se dice que su madre le insistía en que se casara, a lo que le respondió que "todavía era temprano". Y tiempo después, a una mayor insistencia de su madre para que se casara, le contestó que "ya era tarde".
A este pensador le debemos la invención de las cuatro estaciones del año, y el haberle asignado a éste trescientos sesenta y cinco días.
La siguiente reflexión es de Tales de Mileto: "De los seres, el más antiguo es Dios, por ser ingénito; el más hermoso es el mundo, por ser obra de Dios; el más grande es el espacio, porque lo encierra todo; el más veloz es el entendimiento, porque corre por todo; el más fuerte es la necesidad, porque todo lo vence; el más sabio es el tiempo, porque todo lo descubre".
En una ocasión, Tales de Mileto dijo que "entre la muerte y la vida no había diferencia alguna", a lo que de inmediato, uno que lo escuchaba le preguntó: entonces, "¿por qué no te mueres tú?", a lo que Tales le respondió: "Porque no hay diferencia".
Una vez, alguien le preguntó que cuál cosa era difícil, a lo que Tales respondió: "El conocerse a sí mismo". Y la misma persona le hizo esta pregunta: y dinos cuál cosa es fácil, a lo que el filósofo contestó: "Dar consejos a otros".
Esta reflexión también es de Tales de Mileto: "Todo exceso es dañoso; obrar a tiempo es el mejor obrar y más laudable".
Tales de Mileto es de los primero filósofos de la Grecia Antigua que empezó a filosofar. Nunca antes y en ningún pueblo del mundo se había puesto el hombre a pensar sobre sí mismo, el mundo y su relación con él. A estos primeros filósofos les debe la humanidad la más grande contribución que jamás se haya hecho: desentrañar el sentido de la vida y las causas de las cosas.
Estamos hablando que estos primeros filósofos existieron cientos de años antes de Cristo. Por ejemplo, en torno al alma, fue Tales de Mileto el primero hombre de la humanidad que defendió la "inmortalidad del alma".
No ha habido jamás, ningún gigantesco esfuerzo de la inteligencia, como el de los primeros filósofos de la Grecia Antigua. Simplemente, toda la civilización, cultura y educación de Occidente están basadas en sus aportaciones.
En la filosofía de Tales de Mileto, hay, además, una esplendente belleza poética. Y si no, veamos: decía Tales que el ser más hermoso era el mundo, por ser obra de Dios. Que el ser más grande era el espacio, porque lo encerraba todo. Le daba al entendimiento la calidad del ser más veloz. A la necesidad le atribuía la calidad del ser más fuerte, porque la necesidad todo lo vence. Y al tiempo le atribuía el gran valor de ser el más sabio, porque todo lo descubre.
Para Tales de Mileto, en esta cosmovisión poética, son "seres", Dios, el mundo, el espacio, el entendimiento, la necesidad y el tiempo. Este pensador griego en su gran visión del mundo incluyó al espacio y al tiempo, sitúa a Dios, antes que al mismo espacio y tiempo. Cita al mundo como a una "totalidad"; incluye al entendimiento, sin el cual no podría el hombre representarse nada en lo absoluto.
Critilo dice que para estos pensadores griegos, lo más importante de todo consistió en poner el entendimiento al servicio de la comprensión del mundo y del hombre. Estos griegos se empeñaron en la tarea de utilizar el entendimiento, como la actividad suprema del ser humano. Dos mil setecientos años de este arranque del filosofar les ha dado la razón: el saber pensar correctamente es la actividad suprema de toda persona.
Sabiendo pensar es como se ha construido la ciencia, tecnología, artes, la filosofía, el Gobierno y la plena conciencia de que toda persona puede aspirar a etapas superiores de desarrollo.
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