Especialistas del ISSSTE indicaron que la sensación de sed puede ser signo de alerta ante una eventual deshidratación, que iría de ligera a grave. En este último caso, la falta de agua en el organismo podría ocasionar severas consecuencias para la realización de diversas funciones.
Conviene mantener una hidratación adecuada del cuerpo, evitando incluso que se presente la sensación de sed, ya que para ese momento podría haber perdido suficiente agua. Aseguraron que el consumo del líquido permite un mejor rendimiento en las actividades cotidianas.
El cuerpo contiene en promedio 85% de agua; está compuesto de millones de células que se encuentran en un medio líquido, lo que establece la necesidad de mantenerse bien hidratado. Informaron que no es lo mismo ingerir agua pura que tomar jugos, café o refrescos, porque la carga que implican éstos para el riñón es diferente. Deben consumir frutas y verduras con alto contenido de agua, como lechuga, jícama, papaya, sandía y melón.