Presentan más destinos aéreos
La presencia de cerca de 300 mil duranguenses motivó la apertura, a partir de diciembre, del vuelo Durango-Chicago.
Pero también se encontraron condiciones para que en noviembre próximo comience a operar otro vuelo a la capital del país.
La mañana de ayer se realizó el anuncio oficial de la apertura del vuelo a Chicago, Illinois, a través de la aerolinea Volaris y cuyos boletos ya están a la venta a partir de 129 dólares en su modalidad sencilla, pero que empezará el 8 de diciembre de este año para los días martes y sábados.
Según datos del Gobierno del Estado, existen estimaciones de que en la ciudad de Chicago radican unos 300 mil duranguenses, con lo que representan una de las comunidades más grandes de paisanos en el extranjero.
"Queremos que todo el mundo vuele y que todos los duranguenses visiten a sus familiares y amigos en Estados Unidos con tarifas limpias", mencionó Holger Blankenstein.
El Director Comercial de Volaris anunció también que a partir de noviembre se extenderá de dos a cinco vuelos a la semana hacia Tijuana, el cual fue inaugurado en mayo pasado; y en diciembre se extenderá a un vuelo diario.
Añadió que el 6 de noviembre la empresa abrirá la conexión Durango-Ciudad de México, cuyos boletos están también a la venta a través del portal de internet.
"Con estas tres rutas tendremos la oferta de más de 170 mil asientos al año desde y hacia la ciudad de Durango", agregó Holger Blankestein.
La aerolínea añadió que los boletos para los vuelos que operan en Durango cuentan con diferentes promociones para hacerlos más accesibles, considerando también la temporalidad con la que éstos sean adquiridos.
Desarrollo
Durango tendrá conexión a Chicago y el DF por la aerolínea que opera 138 rutas, con una oferta de más de 240 segmentos de vuelos diarios que conectan 61 ciudades.
Flota
38 destinos de la empresa son en México y 23 son internacionales, para lo cual cuenta con 55 aeronaves y con una edad promedio de 4.2 años cada una.
Factores
Admitió que todas las aerolíneas abren rutas bajo el riesgo de que la gente no compre espacios, pero confía en que funcione.