Crecen enfermedades de transmisión sexual
Durante el año que se cerró, se elevó en un 15 por ciento el número de personas que acuden a consulta en el Centro Ambulatorio de Prevención y Atención del Sida e Infecciones de Transmisión sexual (CAPASITS) y que sospechan padecer alguna de este tipo de enfermedades.
De acuerdo a los datos dados a conocer por la primera Jurisdicción de Salud en este centro que atiende a usuarios de 11 municipios tanto urbanos como rurales, se realizan al menos 200 consultas diarias sobre todo de adultos de entre los 25 y 30 años que iniciaron su vida sexual a muy temprana edad.
La población usuaria de este centro aumentó en el año 2015, contando a la fecha, independientemente de las consultas diarias, con 340 pacientes que cada mes reciben el seguimiento de su tratamiento, además de apoyo psicológico; de este universo 20 pertenecen al sexo femenino, dos son adultos mayores y el más joven tiene 19 años.
Estos números reflejan la importancia de que los padres de familia estén informados y capacitados para orientar y educar a sus hijos en el tema de sexualidad, por lo cual se pretende a corto plazo, abrir un grupo de padres aunque ninguno de sus hijos sea portador de alguna enfermedad venérea, pues la misión es prevenirla.
David Bañales Zúñiga, titular de esta jurisdicción dijo que por la edad de los asistentes a este centro se trata de adultos jóvenes lo que obliga a redoblar esfuerzos de capacitación y promoción de la salud sexual entre la población de preadolescentes y adolescentes.
Esto con el objetivo de que al inicio de su vida sexual activa sean responsable y cada quien aprenda a autocuidarse y evitar enfermedades venéreas y de transmisión sexual.
Son 200 consultas diarias de adultos de la zona urbana y rural de los 11 municipios que conforman la jurisdicción pero también acuden personas de la población abierta que sospechan padecer de una infección de transmisión sexual.
Incluso, agrega el galeno, deben acudir todas las personas con vida sexual activa a informarse, capacitarse y por lo tanto cuidar su salud, "sobre todo aquellas personas que incurran en conductas sexuales de riesgo", dijo.
Sobre todo, señaló Bañales Zúñiga porque muchas personas son asintomáticas al padecer VIH, presentan sintomatología hasta que cursan una etapa avanzada y estos son diarreas incontrolables, debilidad, fatiga, entre otros.
Quienes tengan vida sexual activa con conducta de riesgo y presenten ulceras, secreción, verrugas en área genital deben acudir al centro señalado pues la atención oportuna a una infección de transmisión sexual asegura recuperación.