Nevadas, hasta en semidesierto
Dos terceras partes del territorio estatal fueron cubiertas por las nevadas registradas entre martes y jueves. De hecho, la precipitación en forma de nieve llegó hasta lugares en los que se le considera atípica, como Mapimí y Cuencamé, regiones predominantemente áridas.
En el caso de Cuencamé, por ejemplo, desde las 7:50 horas del jueves empezó a nevar, situación que no ocurría desde hace poco más de 18 años, pues se había dado el 12 de diciembre de 1997.
En total, fueron 25 municipios los que registraron las autoridades con caída nieve y aguanieve, circunstancia que derivó en diversas contingencias, si bien se reportó saldo blanco en cuanto a vidas humanas.
Y es que el jueves, de nuevo, se registraron cierres carreteros preventivos tanto en las carreteras que unen a Durango y Mazatlán, como en la vía a Santiago Papasquiaro. Incluso se reportó tránsito muy lento por las vías a Gómez Palacio, que en algunos tramos se cubrieron por completo de nieve.
Así ocurrió también en vías auxiliares y caminos de terracería de Guanaceví, San Dimas, Pueblo Nuevo, Santiago Papasquiaro, Tepehuanes, Tamazula, Otáez, Durango, Canatlán, Nuevo Ideal, Coneto de Comonfort, San Juan del Río, Peñón Blanco, Guadalupe Victoria, Mezquital, Poanas, Nombre de Dios, Pánuco de Coronado, Rodeo, Canelas, Topia, Súchil, Cuencamé, Mapimí e Hidalgo, que es la lista completa de municipios con nevadas.
Ante ello, el Gobierno prevé solicitar Declaratoria de Emergencia para la mayor parte del estado.
Además, la suspensión de clases no se limitó al nivel básico, pues la mayoría de las instituciones de nivel medio superior y superior se sumaron a la medida, luego de que la Secretaría de Educación en el Estado anunciara lo propio para preescolar, primaria y secundaria. Esa medida, no obstante, concluyó, pues anoche la Secretaría de Educación confirmó que hoy se reanudan las actividades.
En el caso de los centros laborales, el delegado de la Secretaría del Trabajo confirmó ausentismo en varias empresas.
En algunas maquiladoras, por ejemplo, no acudió a trabajar hasta el 20 por ciento de la plantilla, algo que se reflejó en la capital.