Instituido el día 28 de agosto como en el que se festeja a los abuelos en México, celebración que se dice surge en el año 1983 oficialmente. En el país, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), hay 10 millones de personas mayores de 60 años de edad y se espera que para el 2050 el cifra de abuelitos en México sea de 36 millones.
La demanda social de esta población es clara: mayor atención por parte de sus respectivas familias principalmente, el hecho de que sean valorados y comprendidos sobre todo por la etapa de la vida por la que atraviesan, revela la Psicóloga Margarita Ortega. Y añade que como sociedad estamos obligados a no abandonar a los abuelos y brindarles la atención que ellos tienen bien merecida por toda la experiencia que en su vida han acumulado y lo que han aportado, dijo.
Actualmente las familias modernas en este región de los Llanos son las abuelas, quienes en muchos de los casos están a cargo de los nietos, mientras los padres trabajan. O en ocasiones son ellos -los abuelos- los que ejercen en determinado momento la tutoría de menores, cuyos padres se encuentran en Estados Unidos trabajando.
Instituciones de gobierno como la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), que brinda el apoyo del programa federal 65 y Más está enfocado a brindar un apoyo económico a fin de que les ayude en solventar algunos gastos de sus necesidades básicas, dado que su etapa laboral y productiva en algunos casos no continúa y si se aprecia que muchos de los abuelos no cuentan con una pensión, este es el único apoyo con el que cuentan para comprar alimentos, medicinas y algo de vestimenta.
El Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam) les extiende una credencial de identificación, misma que les ofrece descuentos en transportación, la compra de medicinas y otros productos. El Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), por su parte, brinda apoyo defendiendo sus derechos y protegiendo su integridad, además de la oportunidad de convivir sanamente a través de los llamados clubes de la tercera edad.