Alerta en Canatlán y Guerrero por el llenado de presas

Se ha emitido la alerta para los municipios de Canatlán y Vicente Guerrero, tras el desbordamiento de las presas Caboraca y Santa Elena, que están provocando que los ríos La Sauceda y Súchil se desborden e incomuniquen poblados; asimismo, el cierre de la carretera Durango-Parral, a la altura del municipio de Rodeo.

Luis Fernando Uc Nájera, director local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), señaló que se tiene personal en constante monitoreo de las presas Caboraca, Peña del Águila, Santiago Bayacora y Santa Elena, porque están derramando fuertes volúmenes de agua.

Sin embargo, añadió, los riesgos más fuertes pueden registrarse con los 204 metros cúbicos de agua que la presa Caboraca en Canatlán está derramando al río La Sauceda y que a su vez llegan a la presa Peña del Águila, que también regresa el agua al mismo río La Sauceda.

Uc Nájera dijo que es un volumen muy elevado el que está sacando la Caboraca por lo que se ha emitido la alerta al municipio de Canatlán y ya es responsabilidad de la Unidad de Protección Civil de ese municipio iniciar con la evacuación o no de comunidades.

No obstante, para las 13:00 horas del viernes ya tres poblados se habían quedado incomunicados porque el agua rebasó el puente de San Miguel de Gracia.

En el municipio de Vicente Guerrero, la alerta se emitió, sobre todo, porque la presa Santa Elena empezó a derramar 32 metros cúbicos de agua al río Súchil y el nivel del mismo comenzó a elevarse por lo que se hizo el llamado a varias comunidades y algunas colonias de la cabecera para estar atentas por si era necesario iniciar con la evacuación.

De acuerdo con Ernesto Zamarripa Arias, director de Protección Civil de Vicente Guerrero, son tres las comunidades que pueden estar en riesgo de inundación: San Pedro, San Francisco Javier y Graceros.

Estas tres comunidades se encuentran a la orilla del río Súchil, en donde el ancho del mismo no es tan grande por lo que a las 15:00 horas el cauce estaba ya en un 90 por ciento y de sobrepasar el 100 se iniciaría la evacuación.

Sin embargo, en la presa Santa Elena el nivel de evaluación que se esperaba para el mismo viernes era de 900 mil metros cúbicos por lo que bastaban 32 metros cúbicos por segundo de agua que se le estaba sacando a la presa para evitar que siguiera elevándose el nivel.

Empero, la alerta se mantuvo todo el viernes por si era necesario iniciar la evacuación de las familias de estos tres poblados.

En la cabecera municipal el riesgo estaba en la colonia Chicago, que está en la ribera del río pero a esta altura el mismo se ensancha por lo que ahí el nivel estaba al 50 por ciento, aunque el problema es por la represa que ahí existe y que es la que arroja el agua a la colonia.