El viacrucis del replaqueo
Cumplir con el replaqueo en Durango se ha convertido en un verdadero suplicio para los propietarios de vehículos. Todos los días los centros multipago se encuentran saturados y en promedio el tiempo de espera para poder tener las nuevas láminas es de cuatro horas cuando menos.
De acuerdo a los datos oficiales, a la fecha se han entregado más de 50 mil juegos de placas lo que representa un récord que a su vez, ha colapsado los sistemas administrativos que sufren para poder dar atención a los cientos de duranguenses que atiborran los siete centros multipagos en la ciudad capital.
La autoridad estatal dice que tal respuesta se debe a que la ciudadanía confía en que ellos utilizarán correctamente el dinero recaudado. En lo personal tengo mis dudas de que sea esta la razón. Son una serie de factores los que han generado el caos actual como el hecho de que las condiciones económicas son adversas y lo que la mayoría de la gente quiere es aprovechar el remanente del aguinaldo y quedar con cero adeudos con sus impuestos para el resto del año en caso de que el asunto financiero se ponga peor.
Claro está que el hecho de que las placas sean gratis durante los primeros tres meses le puso un ritmo diferente al pago. Lo que la ciudadanía desea es ahorrar dinero. Sinceramente creo que son muy pocos los que piensan que irán a pagar pronto porque confían en las autoridades. Se paga porque se tiene esa obligación.
Pero el interés ciudadano ha generado largas filas y ante la incapacidad de habilitar más centros de atención o contar con un pago en línea efectivo, la situación es caótica. La gente ha optado por prácticamente acampar de madrugada en las puertas de los centros multipagos, con el riesgo que eso implica ante las bajas temperaturas. El personal que los atiende se ve rebasado y está exhausto.
Y como sucede en toda crisis, no faltan quienes descubren la forma de hacer negocio. Hay personas que se ofrecen a hacer el trámite a cambio de una módica cantidad ya que sólo es necesario hacer una carta poder simple para autorizar a un tercero o bien, van temprano, obtienen un turno y ya después lo venden. Hay quienes aprovechan para replaquear los vehículos de todos los parientes, amigos, vecinos y conocidos y con ellos hay que esperar hasta media hora o más para que terminen sus trámites.
Sin duda se requiere de una mejor organización por parte de la autoridad estatal para brindar un servicio más eficiente a los exasperados ciudadanos que tras estar varias horas de pie y en la intemperie, pierden los estribos. El sábado pasado en el Centro Multipago de Canelas fue necesario llamar a la policía porque un ciudadano se puso agresivo cuando después de hacer fila casi toda la mañana a las dos de la tarde le dijeron que ya no había turnos. Fue una falla por parte del personal el no informar oportunamente que sólo darían un número determinado de lugares.
El Gobierno Estatal afirma que tomará las medidas correspondientes para mejorar el servicio y más vale que lo haga pronto porque se acerca el cierre de mes y por lo general, en esta fecha se aumenta el número de contribuyentes que quieren aprovechar el 15 por ciento de descuento en el refrendo vehicular.
Por cierto, el pago en línea del predial es una verdadera vacilada. Es verdad, se puede hacer el cargo a la tarjeta desde la comodidad de su casa pero le aparecerá un documento con la leyenda de que no se trata de un recibo oficial y no es válido para hacer otros trámites además, debe presentarse un día hábil después, única y exclusivamente en la Unidad Administrativa "Guadalupe Victoria", para pedir sus recibos. Allí, tendrá que sacar turno para la ventanilla, esperar que le llamen, entregar una copia de su credencial de elector y luego esperar otra vez para recibir los documentos. Un tache para la autoridad municipal por este trámite inútil del pago en línea que para nada le facilita la vida al contribuyente.
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