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JESÚS MENA VÁZQUEZ

Las noticias que nos llegan de los Estados Unidos de las deportaciones de migrantes mexicanos que son sorprendidos por agentes de inmigración al realizar algún trámite administrativo o por faltas menores han comenzado a tener un efecto en la vida de los connacionales que tienen décadas viviendo en ese país.

La psicosis colectiva que generan las deportaciones aleatorias de migrantes ilegales muy posiblemente tendrá consecuencias en el comportamiento de quienes están en esa condición y eventualmente se podrán medir sus efectos en la visibilidad que tienen en ese país y, como una hipótesis, también se verán sus efectos en las remesas que envían a México.

El miedo que tienen los migrantes a ser deportados por faltas menores o por la percepción de que habrá redadas para atrapar ilegales en ese país puede tener efectos negativos en el trabajo de esas personas y también en su comportamiento, ya que tal vez comiencen a enviar menos dinero a nuestro país con el objetivo de ahorrar en caso de que sea necesario cruzar de nuevo la frontera en caso de ser deportados.

La principal causa de que las empresas mexicanas estén presentes en los Estados Unidos con sus productos y servicios es que los 33.5 millones de quienes se consideraban de origen mexicano en 2012, si sumamos los ciudadanos americanos de origen mexicano (alrededor de 22 millones) y los nacidos en México (alrededor de 11.5 millones), tienen el mismo poder de compra que tenemos los más de 115 millones de mexicanos que vivimos en México. Ningún mexicano que vive ilegalmente en los Estados Unidos regresará por una orden ejecutiva del Presidente Trump.

Los inmigrantes ilegales que viven en los Estados Unidos saben que en nuestro país no tendrán el mismo nivel de ingreso y por lo tanto no podrán tener el mismo nivel de vida del que gozan allá. Con el ingreso que ganarían en México haciendo el mismo tipo de trabajo que realizan allá no podrían tener el mismo nivel de consumo del que ahora tienen.

Aún cuando es imposible que se deporten en un periodo de tiempo corto a los alrededor de 11 millones de migrantes ilegales que viven en los Estados Unidos, las deportaciones aleatorias que el gobierno del Presidente Trump ha iniciado contra los inmigrantes ilegales crearán un ambiente de psicosis colectiva que modificará el comportamiento de quienes tienen ese status, seguramente consumirán menos productos y servicios y tal vez consideren ahorrar una cantidad considerable en previsión de una potencial deportación, lo que podría generar un cambio en los montos de remesas que envían a nuestro país.

Twitter: @jesusmenav

Escrito en: Vida pública tienen, Estados, migrantes, mismo

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