Editoriales

Ya no más flores, lo que queremos es igualdad

Nota al Margen

Ya no más flores, lo que queremos es igualdad

Ya no más flores, lo que queremos es igualdad

CITLALLI ZOÉ SÁNCHEZ

Muy rápido nos alcanzó el 8 de marzo, fecha en la que se conmemora el Día Internacional de la Mujer y el cual nació con un propósito muy específico convirtiéndose en el marco para visualizar las condiciones de desigualdad que sufre el sexo femenino en diferentes ámbitos.

Se ha dicho más de una vez que este día no es una especie de festejo al estilo del Día de la Madre sino un recordatorio de lo que todavía sigue pendiente por erradicar en las prácticas, costumbres, creencias y actitudes que afectan a la mujer en su desarrollo personal y profesional.

Por desgracia, las cifras que leímos ayer acerca de lo sufre la mujer casi son las mismas que vimos hace un año. A pesar de la buena voluntad que escuchamos en los discursos, la realidad nos dice que las palabras hasta el momento, no se han convertido en hechos.

Al parecer, los responsables de hacer y aplicar las políticas públicas a favor de la mujer aún no comprenden que ese día es innecesario hacer desayunos para departir con las ciudadanas, o mandar flores o llevarles pastel.

Lo que se pide es que se erradique la violencia y el acoso contra la mujer lo mismo cuando camina por la calle, cuando se sube al transporte público, en los hogares, en el trabajo, en las escuelas o los hospitales.

Lo que se demanda es que se frene la discriminación, que cuando por desgracia las ataquen sexualmente haya ministerios públicos sensibles y capacitados para atenderlas y así se evite la doble victimización, que haya justicia. Lo que se exige es que a igual trabajo haya el mismo salario entre hombres y mujeres.

También es necesario que se cambie el discurso populista que encumbra a la mujer como un ser sufrido y abnegado, "cuidadora por naturaleza", la que da todo por los hijos y es buena administradora. Lo cierto es que no todas las mujeres son buenas madres, otras tienen vicios y son derrochadoras, muchas más disfrutan libremente de su sexualidad aunque las tachen de "zorras".

La mujer es sólo un ser humano, ni más ni menos, igual que el hombre pero por años, ha estado en gran desventaja porque se le consideró (y aún hay quien las considera) menos inteligentes y capaces, incluso solo como un objeto.

Esperemos que el próximo año existan datos contundentes de que la situación ha cambiado, que hay avances, que el mundo es más equilibrado para todos, hombres y mujeres. Por eso, debemos seguir trabajando duro en esta renovación de conciencias.

PUNTO Y APARTE.- La elección del nuevo comisionado del Instituto Duranguense de Acceso a la Información Pública y de Protección de Datos Personales (IDAIP) ha despertado gran interés, en especial dentro de las asociaciones que incluyen a periodistas y comunicadores de la entidad, sin embargo, también la población en general debería seguir muy de cerca este proceso para asegurarse que sea con total transparencia.

No obstante su importancia para el empoderamiento ciudadano, el IDAIP es desconocido por un importante porcentaje de la población. Por eso, es indispensable que la elección de los comisionados esté lejos de las turbias manos de la política. Se espera que la próxima semana los diputados locales ya tengan una resolución al respecto. Hay que estar muy pendientes de este asunto.

Mi Twitter: @citlazoe

Escrito en: Nota al margen mujer, haya, hacer, buena

Noticias relacionadas

EL SIGLO RECIENTES

+ Más leídas de Editoriales

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas