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Cancelar negocios Duarte-Odebrecht también en agua y presas

Yo río libre

JULIO CÉSAR RAMÍREZ

En México, quienes sí frenaron a Javier Duarte y expulsaron a tiempo de su territorio a la transnacional brasileña Odebrecht, conglomerado de negocios en ingeniería y construcción más grande de Latinoamérica ahora descubierto en red delictiva y escándalo de corrupción globalizada de muy altos vuelos por la Operación Lava jato, fueron los pueblos unidos de la cuenca La Antigua por los ríos libres, del estado de Veracruz.

Desde el año 2011, pobladores solicitaron información al entonces gobierno de Javier Duarte de Ochoa acerca de un proyecto de presa hidroeléctrica rumorado para la cuenca La Antigua, pero siempre les negaron datos e incluso la existencia de plan alguno. Aumentaba, sin embargo, la presencia de personas extrañas que entraban y salían de sus comunidades y que con engaños generaban división y desconcierto, alterando la paz y la tranquilidad en la que vivían.

En 2013 descubrieron que Duarte había ordenado a la mayoría priista del Congreso local autorizar la construcción de un denominado Proyecto de Propósitos Múltiples Xalapa a través del esquema del Proyecto de Prestación de Servicios Integrales para el Abastecimiento de Energía Renovable para el Estado de Veracruz, consistente en instalar una presa hidroeléctrica como obra central sobre la cuenca La Antigua, que hacía a un lado la Ley de Veda decretada en 1935 por el presidente Lázaro Cárdenas para la protección del río. Eso alarmó a las comunidades.

El proyecto represaría/secaría el vertiginoso río Los Pescados, fuente de vida de la región, mediante una cortina de 86 metros de altura y 700 de longitud en Las Juntas, unión de los ríos Texolo y Los Pescados, entre los municipios de Teocelo, Tlaltetela y Coatepec, cercanía de Jalcomulco, para almacenar 130 millones de metros cúbicos con el pretexto de abastecer un metro cúbico de agua potable por segundo a Xalapa y generar hidroelectricidad en una superficie de 440 hectáreas que serían despojadas a los campesinos, a quienes se desplazaría a otros lugares.

Fue entonces que, indignados, los pobladores expulsaron de su territorio a técnicos e ingenieros de la que supieron era la empresa transnacional brasileña Odebrecht que ya realizaban mediciones y metían maquinaria sin pedir permiso, informar ni consultar a los verdaderos propietarios de la tierra.

El trasfondo era que en agosto de 2011 Duarte había cerrado en Sao Paulo, Brasil, con Marcelo Odebrecht, accionista mayor de la transnacional -ahora en la cárcel-, primero la inversión por 3 mil 500 millones de dólares por el proyecto Etileno XXI, la más grande privatización petrolera en México, meganegocio que Enrique Peña Nieto retomó en octubre de 2013 cuando recibió al mismo Odebrecht en Los Pinos, involucrando a Pemex. Y en seguida, en sociedad empresarial con el gobierno de Veracruz, la construcción de una presa hidroeléctrica sobre el río Los Pescados, cuenca La Antigua, en la zona de Jalcomulco, con inversión de 450 millones de dólares, para el cual firmó en 2013 un contrato de prestación de servicios para abastecimiento de energía eléctrica por 25 años con la transnacional brasileña, implicando a la Comisión Federal de Electricidad, CFE.

De allá viene también la concesión por 30 años del manejo del agua en la zona metropolitana Veracruz-Boca del Río-Medellín para Odebrecht junto con Aguas de Barcelona, que se echó a andar en 2015.

La presa -detectaron los pobladores- secaría la cuenca, arruinaría a pescadores, agricultores y prestadores de servicios de ecoturismo nacional e internacional basado en el descenso por los rápidos del río, rafting, rappel, tirolesa, cañonismo, etcétera, sustento de la economía regional.

Alertadas, más de 40 comunidades unidas de la cuenca La Antigua instalaron el 20 de enero de 2014 el campamento permanente Centinelas del Río en el predio Tamarindo, centro de la principal zona de afectación, para impedir la entrada de Odebrecht. Ahí han permanecido tres años, a la intemperie, bajo la bandera de México, frenando de manera momentánea hasta el día de hoy el proyecto de despojo que tramó Javier Duarte. Exigen al ahora gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, al Congreso de Veracruz y al gobierno federal su cancelación definitiva, bajo la convicción de que la tierra no se vende y que se respete la voluntad de los pueblos unidos de la cuenca La Antigua por los ríos libres que es: no a la presa.

@kardenche

Escrito en: Yo río libre cuenca, transnacional, Duarte, presa

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