Proyectos urbanos dispares
Dos interesantes obras estuvieron en la agenda pública local durante las semanas pasadas: hacer peatonal un tramo de la Avenida Fanny Anitua, impulsado por el Gobierno Municipal, y el inicio de la construcción del Parque Lineal del Parque Sahuatoba a Garabitos, que es propuesta del Gobierno Estatal. Ambos proyectos comparten una nueva visión de desarrollo urbano, pero parten de supuestos completamente diferentes.
Con el proyecto de la Av. Fanny Anitua, definitivamente faltó mucho cabildeo y una verdadera estrategia de comunicación para dar a entender sus beneficios, de esta forma, una buena idea de política pública, pero con ausencia de factibilidad económica y social, quedará muy seguramente archivada, esperando a tener mejores operadores.
Sostengo que ambos proyectos son valiosos ya que ayudarán a reducir la visión cochecentrista de movilidad. Las ciudades eran planeadas para que los autos se desplazaran cómodamente, se incentivaba su uso y eran un símbolo de estatus. Hoy que conocemos el impacto negativo que ha tenido está visión del mundo, debemos de generar una ciudad que privilegie al peatón y los modos sustentables de transporte.
Aunque el Proyecto del Parque Lineal, está pensado para que sea un espacio recreativo y deportivo y no como una estrategia de movilidad, es buena noticia que se invierta en infraestructura para el peatón y bicicleta, y no en pasos elevados ni en puentes peatonales, y tal vez a un futuro que esa zona tenga un mayor desarrollo, el parque pueda evolucionar a una opción de movilidad.
Los dos proyectos incrementan la plusvalía de las zonas, sobre todo los terrenos donde pasará el Parque Lineal, si los proyectos son agradables a la vista, podrían ser espacios propicios para la contemplación y relajación, ser nuevas zonas culturales, polos de desarrollo e incluso generar identidad duranguense, así como lo es el Paseo Constitución.
Sin embargo, también las diferencias entre ambos proyectos son abismales, de entrada Fanny Anitua muy probamente no se materialice a corto plazo, mientras que el Parque Lineal se espera que quede listo para finales de este año. Asimismo, las protestas por el proyecto de peatonalización han sido muchas, ya sea por los cambios en las rutas de transporte público, las personas que perderían acceso a sus cocheras, o los riesgos de que no se convierta en un espacio seguro, y que termine degradando la zona.
En el caso del Parque Lineal, las quejas no son evidentes, en primer lugar, porque es una área prácticamente abandonada, porque es el anhelo de muchos deportistas que utilizan esa zona para entrenar y porque proviene de un ejercicio de cabildeo que ya había iniciado la pasada administración, desde la donación del terreno de las vías de ferrocarril hasta la sociabilización del proyecto.
Como reflexión final, y ante la falta de información oficial de ambos proyectos, más allá de notas de prensa, es urgente que los gobiernos locales transparenten toda su obra pública, que sociabilicen muy bien lo que planean hacer, con mecanismos para que los ciudadanos pueden enriquecerlos y que tengan mecanismos en tiempo real para darles seguimiento, una vez que están en ejecución.
Hoy que hablamos de licitaciones amañadas, poca calidad en las obras publicas o de conflictos de intereses, sería fundamental contar con toda la información precisa, desde el proceso de planeación, hasta la licitación y el avance en tiempo real de las obras, todo de manera sencilla, transparente y sin hacer trámites burocráticos, es decir, lograr verdaderos gobiernos abiertos.
Twitter: @omarortegasoria