Todos contra todos

Momentos inéditos y muy peligrosos para la gobernabilidad de México se viven en el Congreso de la Unión, las fuerzas políticas están muy polarizadas y ni siquiera el proceso electoral ha iniciado. Los espacios representativos para la construcción de concesos han sido perdidos, los acuerdos no han sido respetados, los ánimos están muy crispados y hay total incertidumbre por lo que pueda pasar.

En el Senado tienen un Presidente panista sin apoyo de su propio partido, acusado de traición, pero eso sí, respaldado por los demás fuerzas políticas. Como recordamos, en el Senado correspondía las Presidencias de Mesa Directiva y de la Junta de Coordinación Política al PRI, sin embargo, cedió la mesa directiva al PAN, con la condición que respetara su derecho de veto. El PAN decidió respaldar a 2 Senadoras, sin embargo fueron vetadas por el PRI, y al final el Senador Ernesto Cordero fue electo Presidente.

Se decía que era una maniobra del PRI para hacerse de los votos necesarios para imponer al Fiscal, pero después, Cordero y sus seguidores se comprometieron a no avalar ese nombramiento. Esta crisis rebotó en la Cámara de Diputados y ha impedido que hasta la fecha se instale la nueva mesa directiva, que le corresponde en este último año al PRI.

La mesa directiva es quien convoca a sesiones, hace el trámite de iniciativas y en general, lleva la representación de la Cámara de Diputados, por lo que sin ella estaríamos hablando de un órgano totalmente paralizado, sobre todo, cuando la ley no contempla el camino a seguir después del 5 de septiembre.

Precisamente en este plazo se intentó que la Mesa Directiva se instalara, pero fue imposible para el PRI obtener los dos tercios de votos de los diputados presentes, a pesar de que se hablaba de un apoyo por Morena a cambio de obtener una vicepresidencia y más espacios en Comisiones. Sin embargo, esto jamás pasó y se obligó a detener el reloj legislativo hasta hoy jueves.

El PRI menciona que la Cámara de Diputados está secuestrada por el PAN, mientras que este último se autoproclama como defensor de la autonomía del fiscal, sin embargo, los únicos facultados para nombrarlo son los Senadores. En pocas palabras, están peleando en la Cámara de Diputados, lo que deben de pelear en el Senado. El contexto tampoco ha ayudado, la creación del Frente Amplio Democrático, las acusaciones de enriquecimiento del Presidente del PAN y el escándalo del Ferrari del hoy Procurador. Todo es un galimatías y hay intereses por todos lados.

Por si esto fuera poco, mañana 8 de septiembre es la fecha límite para presentar el Paquete económico 2018, es decir, la ley de ingresos, el presupuesto y los lineamientos generales de política económica, sin una Cámara de Diputados constituida, será imposible darle el trámite correspondiente, generando mucha incertidumbre que puede perjudicar terriblemente a México.

De esta forma, nuestros legisladores, en lugar de preparase para analizar el Paquete Económico 2018, generando unidad a favor del TLC o haciendo más reformas a favor de los dreamers, están inmersos en una pelea sin un final feliz para México. La única salida evidente es aprobar una reforma para quitar el pase automático, ya sea sacando de la congeladora la iniciativa de Peña Nieto o construyendo otra. El problema es que ya no hay tiempo ¿Quién ganará las vencidas?.

Twitter: @omarortegasoria