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El juego que todos jugamos

Pura Intuición

RAFAEL ALARCÓN

Hoy en día vemos que en el mundo se viven crisis de todo tipo como la incertidumbre de la terminación del TLC que sin duda afecta la economía de nuestro país. La independencia de Barcelona, el prepuesto de gasto por parte del gobierno, la crisis económica, la restauración del sismo en nuestro país y principalmente la denominación de candidatos al periodo gubernamental del 2018 y estos son los escenarios que nos depara para el cierre del año.

Los problemas teóricos y prácticos del sistema político de la sociedad constituyen en la contemporaneidad problemas verdaderamente cardinales aún cuando su importancia no haya sido constatada en toda su real magnitud. Esto se explica por el hecho de que la acertada solución a las cuestiones relativas al papel y lugar del Estado, él o los Partidos políticos, las numerosas organizaciones sociales y de masas, el Derecho y la conciencia jurídica y la ideología política en la construcción de la sociedad , como modelo alternativo al capitalismo, en todas sus fases y especialmente en su fase neoliberal, contribuyen a resolver con mayor eficacia las tareas económicas, sociales, políticas y espirituales que la sociedad debe enfrentar en este proceso.

Mirando el tema del sistema político de la sociedad en su aspecto más general y en mucho de sus aspectos particulares nos percatamos de que no es posible abordar el estudio del fenómeno político sin analizar la categoría SISTEMA POLITICO donde están inmersas las categorías, conceptos, e instituciones de la Teoría del Estado y donde se pone de manifiesto además su esencia como elemento de la dominación clasista muy necesaria para la cabal comprensión del Sistema Político en sus generalidades y en sus particularidades, fundamentalmente el Sistema Político existente en nuestros días.

Una vez más alertamos, que la crisis Moral política, es demasiado preocupante por cuanto nuestro futuro se pone cada vez más dramático, porque no vislumbra nada bueno para salir de esta crisis moral, y sobre todo, porque los partidos políticos, sea de izquierda, derecha, centro u otras denominaciones, constituyen pilares fundamentales del sistema democrático.

Los partidos políticos son grupos sociales libremente formados, que tienen una ideología o tendencia que une a sus miembros para ejecutar una acción política común. Sin embargo, la presencia de partidos en un país, expresa explícitamente que la opinión de los ciudadanos está dividida en diversas corrientes, enrolan a sus militantes que serán parte de su agrupación; y de esta manera inician la búsqueda de su razón de ser, que es disputar el poder con la visión de conquistarlo. Pero la crisis política que hay en los partidos, es netamente Moral.

Por esta razón, muy pocos ciudadanos se afilian a los partidos políticos. Una gran parte se mantienen independientes y solo participan al momento de elegir o al momento que deciden por quien votar. Por todas estas razones es importante alentar a los ciudadanos, que antes de votar se averigüe bien la vida moral y pública que lleva su candidato preferido. Para que al momento de votar tengan la certeza de que están eligiendo a un buen político (moralmente hablando), y así, no volvamos a cometer los errores históricos que nos ha llevado a una extrema pobreza Moral.

Sin embargo, en estos últimos años, el comportamiento moral de los políticos se ha deteriorado al extremo que la ciudadanía en general, tienen un concepto pésimo de los partidos políticos y de sus miembros, porque los ve como grupos que solo persiguen el poder para saciar sus intereses corruptos, y mantenerse en el gobierno solo para salvaguardar los intereses de un grupo minoritario.

Este concepto nocivo, crea un panorama desolador para los partidos políticos, sin embargo, debemos buscar algunas soluciones para tratar de enmendar este error moral en la que están incurriendo muchos líderes. Creemos que la sociedad en su conjunto debe hacer todo el esfuerzo posible para corregir lo que históricamente hemos deteriorado con nuestra forma moral de actuar. Debemos rehabilitar y cultivar nuestros valores de vida, que son: la verdad, la justicia, la libertad, la paz, la armonía.

Es absolutamente cierto que nuestro país necesita nuevos líderes con alta calidad moral, que demuestren capacidades extraordinarias, tanto intelectual como moralmente, sobre todo, necesitamos líderes que cultiven sus valores de vida, con conciencias nacionalistas, con principios que resalten la verdad como el valor superior y la justicia y la libertad como pilares de la democracia. Este cambio, generaría un nuevo orden en la vida democrática de nuestro país, y como resultado se cerraría todo espacio para quienes tienen costumbres corruptas de vivir de lo ilícito.

Debemos recordar que la Moral es una ciencia que contiene principios que rige la vida humana exitosamente, y no es un término meramente religioso ni fundamentalista. Además, solamente siendo Moral se puede manifestar los valores que están en nuestra naturaleza interna. Es decir, que sin moral no hay valores.

Como podemos apreciar, el problema moral, crea un panorama desolador en nuestro país, por eso, un político debe preocuparse en conocer no sólo los principios morales, sino las consecuencias que ocasionan en una vida que transgrede sus principios. Y para reforzar y elevar su vida a una alta calidad moral, deben buscar cultivar los valores de vida que son: la verdad, la justicia, la libertad, la paz, la armonía y la vida.

Es mi intuición que hoy en día la crisis más grande que vive la sociedad es la pérdida de valores lo que tren consigo una verdadera crisis social y sino veremos la obra de teatro que sin duda somos espectadores y ojalá la sociedad se convierta en protagonista ¿o usted qué opina?

Escrito en: Pura Intuición sociedad, crisis, vida, partidos

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