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Una infancia no tan dulce

Enfrentando la diabetes infantil

Una infancia no tan dulce

Una infancia no tan dulce

Cristina Garza

Para que nuestro organismo tenga un funcionamiento eficaz, requiere de energía, la cual es obtenida a través de los alimentos. De acuerdo a la Federación Mexicana de Diabetes A.C., cuando la capacidad del cuerpo para transformar el alimento en energía se encuentra afectada, es posible que se deba a la presencia de una condición llamada diabetes.

En México, la diabetes mellitus registraba más muertes que cualquier otra enfermedad hasta el 2015, situación que por primera vez provocó que se emitiera una emergencia epidemiológica para una enfermedad no infecciosa.

Alrededor del mundo, la obesidad es cada vez más frecuente en la población de menor edad, lo que también ha ocasionado que la diabetes infantil sea una realidad a la que la mayoría de familias no cree llegar a enfrentarse.

A partir de la incidencia de obesidad infantil, se calcula que 4 de cada 10 niños podría tener diabetes tipo 2 diagnosticada en el país. Pero no existe solo un tipo de ella, la diabetes infantil puede presentarse en dos vertientes y dependiendo de las condiciones de salud que se tengan.

Los tipos de diabetes

La diabetes infantil particularmente, se trata de un conjunto de alteraciones metabólicas que elevan los niveles de glucosa en la la sangre. De no ser controlada esta hemoglobina glucosilada (fracción de glóbulos rojos con glucosa adherida), la calidad de vida del pequeño paciente se puede ver afectada a largo plazo, con consecuencias tales como la ceguera, hipertensión, derrame cerebral, impotencia, enfermedades pulmonares e insuficiencia renal.

Este padecimiento se puede clasificar en los tres siguientes tipos:

Diabetes tipo 1: De acuerdo al sitio bbmundo.com, alrededor de 13, 500 niños tienen diabetes tipo 1 en México. Estas cifras posicionan a nuestro país en el décimo lugar de incidencia del padecimiento a nivel mundial.

La diabetes tipo 1 o insulino-dependiente suele aparecer durante la infancia, adolescencia y en los primeros años de la adultez, es la menos común de los tres tipos. No tiene un origen genético necesariamente y quienes las sufren, no producen la insulina necesaria para que la las células absorban la glucosa de la sangre.

Diabetes tipo 2: Este es el tipo más común y se hace presente con mayor frecuencia en adultos de mediana edad. En este caso el páncreas funciona pero de forma deficiente al producir poca insulina o inclusive de baja calidad.

Debido a la sintomatología, puede tardar algún tiempo en detectarse y es difícil de diagnosticar.

Diabetes tipo 3: Reconocida por la Organización Mundial de la Salud, el tercer tipo de diabetes se refiere a la gestacional. Se trata de un padecimiento que aparece en mujeres embarazadas y suele diagnosticarse en etapas avanzadas.

El organismo no produce o utiliza eficazmente la insulina para la gestación y su aparición implica un riesgo de que el bebé desarrolle obesidad o diabetes tipo 2 en el futuro. Asimismo, aumenta la probabilidad de que la madre desarrolle diabetes tipo 2 en los años consecuentes.

Entre la malnutrición y la obesidad

Mientras que el sur del país sufre de desnutrición, en el norte la obesidad infantil es un problema latente.

De acuerdo al sitio del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, mejor conocido como Unicef, México ocupa el primer lugar mundial en obesidad infantil, a pesar de que en una parte del territorio, la desnutrición crónica persiste.

Hasta hace 10 años, el 96 por ciento de los pacientes que llegaban a la Clínica de Diabetes del Hospital Infantil de México Federico Gómez (HIMFG) tenían diabetes tipo 1, el tipo que no puede prevenirse.

En la actualidad, casi la mitad de los niños que llegan por primera vez tienen diabetes tipo 2.

Más alarmante aún, es que en adultos se sabe a grandes rasgos cómo será el desarrollo de la enfermedad, pero en los pequeños aún se está aprendiendo y todos los indicios demuestran que la diabetes tiene efectos más severos en ellos.

Se tiene evidencia de que uno o dos años después del diagnóstico y a pesar del control de niveles de glucosa, los niños ya reportan falla renal y neuropatía diabética.

Una vida dulce y saludable

La medicina preventiva es actualmente uno de los tratamientos más efectivos que existen para los padecimientos que están atacando a la población mundial y se posicionan como problemas de salud pública.

Específicamente, la diabetes está íntimamente ligada con los excesos en el estilo de vida y a pesar de que el niño(a) no presente sobrepeso, es recomendable que se le realice una prueba de glucosa.

De acuerdo a Federación Mexicana de Diabetes A.C. y a la nutrióloga Maricarmen Oses, cuando se habla de una correcta alimentación para los niños, se debe comenzar por destacar la importancia del desayuno.

“El desayuno echa a andar el cuerpo y se queman calorías, es el primer combustible”, destaca la Federación Mexicana de Diabetes A.C. En este punto se recomienda que el desayuno no contenga grandes cantidades de azúcar, y para lograr el equilibrio completo deberá tener fruta, proteína (huevo, leche, queso o frijol) y algo de carbohidrato (pan, tortillas, cereal, etc.).

Otras estrategias que recomienda la especialista en nutrición son disminuir el número de calorías con intercambios en los alimentos. Por ejemplo se pueden reemplazar las bebidas de leche, los jugos y los refrescos, por bebidas endulzadas con sustitutos de azúcar.

En vez de ofrecer caramelos, hay que poner al alcance refrigerios saludables como la fruta. Y si acaso se llegan a ofrecer postres en los alimentos, habrá que optar por endulzarlos de igual forma con sustitutos.

Para complementar esta vida dulce y sana, también en necesario promover la actividad física y esto se puede hacer de forma indirecta, eligiendo caminar en lugar de usar el coche en cuanto sea posible. También puedes aprovechar los fines de semana para realizar actividades al aire libre, además de promover el ejercicio, serán más entretenidas para tus pequeños.

Prohibirles los alimentos no es la solución, ya que se genera un estrés por medio de la prohibición. Lo que si se puede hacer es disminuir la cantidad y la frecuencia. Y si acaso se varía mucho de la dieta, se recomienda buscar el equilibrio y reducir las azúcares de la ingesta total del día.

Ustedes como padres son el primer ejemplo, sus hijos son el reflejo directo de los hábitos de alimentación que estén practicando. Por lo tanto incluyan a los niños en la cocina, aprendan de nutrición juntos y recuerden que los extremos son el problema, la clave se encuentra en el balance.

Viviendo con la diabetes

La diabetes no es un impedimento para que los niños se desenvuelvan de forma normal en su vida. Atletas olímpicos, jugadores de fútbol profesional, cantantes, congresistas y un sin fin de profesionistas viven día a día con este padecimiento.

Después de el diagnóstico, solo será cuestión de organización para lograr que todos los ajustes en el estilo de vida familiar se vayan aplicando.

En el entorno escolar se tendrá que notificar tanto a los directivos como a los maestros de tu hijo(a). Es recomendable solicitar una reunión para tratar aspectos como los horarios de clases y de alimentos.

Si ustedes ya tuvieron una orientación con su pediatra o especialista, es recomendable que les otorguen a los educadores la información relevante sobre los cuidados o posibles emergencias.

Otros puntos que no deberás olvidarte de resolver antes de que tu hijo vuelva a la escuela son:

La alimentación: Un control en los horarios de alimentación es primordial para mantener los niveles de glucosa en orden. Conocer el menú que se ofrece en la escuela es de gran ayuda, a pesar de que ustedes desde casa le envíen los alimentos.

Tratamiento de insulina: Dependiendo de la actividad física que realicen los niños, es la cantidad de insulina que se le deberá de administrar. Solo en caso de que tenga clase de deportes, es cuando podría existir una variación, por lo tanto también deberán de estar al pendiente de esta situación.

Según la Fundación para la Diabetes, los días de exámenes y el estrés de levantarse temprano, también son una condicionante para definir las dosis.

Apóyate en las nuevas tecnologías: A pesar de que las autoridades de la escuela ya se encuentren notificadas, es recomendable mantener un contacto directo con su profesor para cualquier emergencia, Whatsapp podría ser una buena opción.

Hoy en día también existen glucómetros y sistemas de monitorización que pueden ser utilizados a través de aplicaciones móviles, con estas herramientas el cuidado de los niños con diabetes se hace mucho más llevadero.

No olvides que tu hijo puede realizar cualquier actividad al igual que sus compañeros, así que evita caer en actitudes sobre protectoras y solo procura su control glucémico.

La alarmante actualidad

De acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012

-La diabetes es una de las principales causas de muertes en México

-Alrededor de 4 millones de personas han sido diagnosticadas con diabetes

- Los estados con mayor prevalencia son: Distrito Federal, Nuevo león, Veracruz, Tamaulipas, Durango y San Luis Potosi.

- Hasta un 43 por ciento del riesgo de desarrollar diabetes se puede disminuir con una dieta adecuada y actividad física.

Fuentes: fmdiabetes.org, www.fundaciondiabetes.org, www.diabetesbienestarysalud.com, www.bbmundo.com, www.jornada.unam.mx, www.vix.com,

Escrito en: diabetes, tipo, niños, obesidad

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