Esta es una oportunidad de renovar el compromiso de amor de unos para con otros, disponiéndose a experimentar la experiencia del padre, a través del perdón.Ayer se celebró la consagración de la Arquidiócesis de Durango a los sagrados corazones de Jesús y María, acto que convocó a miles de fieles católicos que se dieron cita en la Velaria de la Fenadu para participar de dicha actividad.
Autor: El Siglo de Durango, publicada el 11 de junio de 2016