
Bancos se alistan a desplome de utilidad
Los principales bancos que operan en México cuentan con provisiones por más de 27 mil millones de pesos para contener el inevitable y fuerte golpe que les generará el Covid-19.
Los recursos generados durante el primer trimestre del año servirán para mitigar la crisis sanitaria de uno de los mercados más rentables en América Latina y que verá interrumpida una larga racha de años de vacas gordas.
'Tenemos que analizar todos los negocios en los que estamos y los riesgos que representa cada uno. Y para ello vamos creando provisiones en distintos frentes para riesgo de crédito, para riesgo operativo, para riesgo de mercados', dijo el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Luis Niño de Rivera.
'Y por consiguiente, con una época compleja como ésta, no necesariamente la utilidad de la banca cae, porque el negocio es menor, sino puede ser el impacto de estas provisiones para tener mejor situación en el estado financiero de bancos a futuro', añadió.
De enero a marzo pasado, las ganancias de los bancos que operan en México sumaron 30 mil millones de pesos, una caída de 32 por ciento respecto del mismo periodo de 2019 en términos reales, informó la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Debido a su fortaleza financiera, distinta a las peores crisis en el sector que obligó a su rescate en los años 90, los bancos aseguran que serán un sector que aportará a la recuperación de la economía nacional.
El Banco de México anunció el mes pasado un programa de apoyo financiero para que las instituciones provean de liquidez en el mercado, particularmente a hogares y micro, pequeñas y medianas empresas cuyos ingresos han sido afectados por la pandemia.
No jalarán parejo. Sin embargo, la fortaleza del sector no aplica para todas las instituciones. La calificadora Moody's ha advertido problemas para firmas medianas, como Banco Ahorro Famsa, que enfrentarán problemas en su operación ante la caída de la economía mexicana en 2020.
'Los préstamos morosos de Banco Ahorro Famsa han seguido aumentando a 16.8 por ciento en el primer trimestre de 2020, desde 14.6 por ciento a diciembre de 2019, debido al difícil entorno operativo en México.
'Las interrupciones provocadas por el coronavirus, que han llevado a medidas de permanencia en el hogar y una fuerte caída de la actividad económica, presionan más las condiciones operativas del banco y la calidad de sus activos', detalló.