La afectación a la ganadería causada por el prolongado estiaje contrasta con la buena exportación y comercialización local de bovinos, en el estado de Durango.
Heriberto Quiñones Soria, presidente de la Unión Ganadera Regional de Durango (UGRD), informó que en lo que va de la actual temporada de exportación (que inició en septiembre de 2010), se han ubicado en el mercado de Estados Unidos 128 mil becerros en pie.
Mientras tanto, en el ámbito local, se ha vendido a compradores de diversas entidades del país alrededor de 100 mil semovientes (sobre todo vacas y toretes), cuyo principal mercado para el consumidor se encuentra en el DF y área metropolitana.
En el vecino país del Norte compran becerros de 300 libras en promedio (136 kilogramos), mientras que a los compradores locales les interesan animales más grandes, los llamados toretes, que ya están casi listos para el matadero.
El kilogramo de becerro de exportación en pie oscila en los 25 pesos, mientras que el de torete se vende en 20 pesos. No son los mejores precios, pero existe la oportunidad de comercializar.
La exportación en este ciclo 2010-2011 ha sido exitosa si se toma en cuenta que la temporada pasada fueron 75 mil cabezas las que se colocaron en el mercado norteamericano. Actualmente dicha cifra casi se duplica.
LA OTRA CARA
En contraste con la regular comercialización de semovientes, Durango ha vivido una de las sequías más severas de los últimos años, situación que afecta a todos los sectores productivos, incluyendo el agropecuario.
La UGRD recibió reportes de hasta cinco mil 500 cabezas de ganado muertas durante este periodo de estiaje, una cifra muy apegada a la estadística que tiene la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
Y es que hasta la fecha, cuando la temporada de lluvias debería estar en plenitud, las precipitaciones se han presentado de forma irregular.
Mientras que en algunos lugares se presentan aguaceros, en otros no cae el agua, además de que las precipitaciones no son constantes, sino esporádicas.
La inconsistencia de las lluvias provoca una situación adversa en los agostaderos, ya que los animales hambrientos se apresuran a comerse los retoños que apenas brotan y no dan oportunidad de que la hierba crezca.
Quiñones Soria manifestó que ante la compleja situación, socios de la Unión Ganadera participaron en el esquema de subsidio de alimento para los semovientes, en el cual, gobiernos del Estado y Federal cubren el 50 por ciento del costo del producto.
Por su parte, la UGRD apoya a sus socios con el flete, mientras que ellos cubren la otra mitad del costo del alimento.
Hasta el momento se han entregado alrededor de mil toneladas de alimento para ganado subsidiado, aunque se espera llegar a las mil 500 en próximos días.
Mientras tanto, los productores pecuarios siguen a la espera de que la temporada de lluvias se regularice, teniendo en cuenta que para agosto próximo se prevé que se presenten precipitaciones considerables.
Comercio
En lo que va de la actual temporada de exportación (que inició en septiembre de 2010), se han ubicado en el mercado de Estados Unidos 128 mil becerros en pie.
Mercado
En el ámbito local, se ha vendido a compradores de diversas entidades del país alrededor de 100 mil semovientes (sobre todo vacas y toretes).
Clientes
En el vecino país del Norte compran becerros de 300 libras en promedio (136 kilogramos), mientras que a los compradores locales, les interesan animales más grandes.
Precios
El kilogramo de becerro de exportación en pie, oscila en los 25 pesos, mientras que el de torete, se vende en 20 pesos, según informó la UGRD.