Un futuro catastrófico si se permite otra huelga

Ahora que se habla de la posibilidad de lograr que empresas asiáticas y europeas se instalen en Durango con grandes inversiones y posibilidades de generar muchos empleo, es importante hablar de la estabilidad laboral en el estado y creo que últimamente existe un sindicato que ha logrado poner en riesgo a casi mil trabajadores de dos empresas mineras: la Cerro de Mercado en la ciudad de Durango y la Primero Mining de Tayoltita, en San Dimas.

El llamado Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana, mejor conocido como el sindicato minero de Napoleón Gómez Urrutia, ha emplazado otra vez a huelga a la empresa minera de San Dimas, la Primero Mining, ahora como una medida de presión para exigir un mejor reparto de utilidades, es decir, lo mismo que hizo al irse al paro con la empresa minera Cerro de Mercado.

Recordemos que en el Cerro de Mercado se fueron a paro porque exigían un pago de utilidades mejor para los trabajadores a los que la empresa Altos Hornos de México les ofrecían cuatro mil 500 pesos y el sindicato pedía 10 mil y como les dijeron que no se fueron a paro, mismo que ya cumplió más de un mes y no se ve ningún arreglo cercano; incluso, ya hasta los dueños de la mina plantearon mejor la posibilidad de cerrarla o despedir personal para darle mayor rentabilidad y esto provocó que el sindicato ya analice mejor quedarse con los cuatro mil 500 de utilidades pero evitar un fuerte número de despidos.

Este mismo sindicato, el de Napoleón Gómez Urrutia, inició una huelga el 15 de febrero en la empresa minera Primero Mining de San Dimas, una huelga que duró 59 días exigiendo mejores prestaciones para los trabajadores; incluso, fue la primera huelga minera a nivel nacional en los últimos cinco años.

En su momento hubo simpatías de mucha gente con el sindicato minero por defender a los trabajadores de San Dimas, luego por defender a los del Cerro de Mercado, pero ahora, ahora creo que ya esa simpatía se está perdiendo incluso con muchos de la mina ubicada en la ciudad de Durango.

Y es que al ver que la empresa Cerro de Mercado no va a ceder y que ellos como sindicato sí pueden ceder, entonces hay que buscar otra mina para ganar y así cubrir lo que podría ser la derrota del sindicato en el Cerro de Mercado.

Y es que ya perdieron en la mina de Velardeña donde buscaron la titularidad del contrato colectivo y no lo lograron, aunque para ellos no fue una derrota porque no tenían el contrato.

Lo que este sindicato está pidiendo en San Dimas está, desde mi punto de vista, fuera de la realidad financiera de cualquier empresa en México, y la verdad sí creo que pone en riesgo la operación en la mina y la estabilidad económica de la zona y basta recordar que en la pasada huelga de febrero casi hacen quebrar al sector comercial de Tayoltita, la cabecera municipal de San Dimas, que depende al 100 por ciento del trabajo minero.

Tenemos que reconocer que la empresa minera Primero Mining se está recuperando de las pérdidas económicas y operativas provocadas por la huelga de 59 días al principios del año. Este hecho, aunado a los bajos niveles de producción que reportó la mina en el 2016, coloca a la empresa en una posición de desventaja financiera y es que para cumplir las nuevas exigencias sindicales requieren de 75 millones de pesos.

Permítanme explicarme mejor: el sindicato está demandando el pago de utilidades por 150 mil pesos para cada uno de los trabajadores de la empresa que son 500, por lo que necesitan 75 millones para cumplir. Así de grandes son las pretensiones del sindicato.

La empresa minera ofrece, hasta donde tenemos conocimiento, alrededor de 40 mil pesos para cada trabajador, pero el sindicato emplaza a huelga con la pretensión de llegar a 150 mil pesos de utilidades por trabajador.

Las pretensiones del sindicato, de acuerdo con expertos, son mayores en cuatro veces a lo que se les ha dado este año a trabajadores mineros en otras empresas altamente rentables en otros estados del país, que es de alrededor de 30 mil pesos.

Ojalá que empresa y sindicato logren un acuerdo razonable que beneficie a ambas partes, pero sobre todo para no afectar a la población de Tayoltita, que está muy inquieta con la posibilidad de una segunda huelga en el año, pero también que no afecte la imagen del estado ahora que tanto el Gobierno Estatal como el Municipal hablan de la posibilidad de inversiones asiáticas y europeas. Incluso, se habla de instalar en esta ciudad de Durango un parque industrial llamado Asia-México para recibir a las empresas de aquel continente.

En serio, Durango ya no puede permitirse otro cierre de operaciones por huelga. Ya van dos en este año en la entidad; un tercero sería catastrófico para un posible Durango industrial.

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