¿Qué es la anosmia y cómo se trata?
La anosmia puede ser temporal o permanente. Aunque hay personas que nacen con este trastorno de manera congénita, lo habitual es que sea un trastorno adquirido. Según datos del portal Hola Doctor, los problemas con el sentido del olfato aumentan con el envejecimiento y son más comunes en los hombres que en las mujeres.
Las causas más comunes de la anosmia son los problemas nasales, como pólipos nasales, senos bloqueados, alergias estacionales, sinusitis, rinitis, gripes o resfriado. La anosmia también puede tener causas estructurales, como una desviación del tabique nasal o la presencia de un cuerpo extraño en la nariz.
Otra posibilidad es un problema con parte del sistema nervioso responsable del olfato. Algunos estudios han sugerido que la pérdida de olfato podría ser un signo temprano de una enfermedad neurodegenerativa, como la enfermedad de Alzheimer o la enfermedad de Parkinson.
Quienes tienen anosmia también pueden notar problemas con el sentido del gusto. Cuando se altera el sentido del olfato algunas personas suelen cambiar sus hábitos alimenticios, comen muy poco e incluso pierden peso de forma involuntaria, mientras que otros, al contrario, pueden comer demasiado y aumentar de peso.
¿CÓMO SE DIAGNOSTICA?
Tanto los trastornos del olfato como los del gusto son diagnosticados por un otorrinolaringólogo, médico que se especializa en trastornos del oído, nariz y garganta. Una evaluación precisa de un trastorno del olfato incluirá un examen físico de los oídos, nariz y garganta, una revisión de la historia médica y una prueba del olfato administrada por un profesional de la salud.
Tratamiento.-Si el origen es alguna obstrucción nasal, como pólipos que estén limitando el flujo de aire en la nariz, tal vez sea necesario realizar una cirugía para eliminarlos y restaurar el sentido del olfato. Los tratamientos con antiinflamatorios y antibióticos o la irrigación nasal se pueden utilizar para tratar casos relacionados con sinusitis u otras enfermedades.
Apoyo
Si el trastorno no puede ser tratado con éxito, se recomienda buscar apoyo psicológico para ayudar en la adaptación.
Dato
Algunas personas recuperan la capacidad para oler cuando mejoran de la enfermedad que causó la pérdida del olfato