Situación. Las siembras de frijol van muy bien, pero suman dos semanas sin lluvias y en estos momentos está el crecimiento del ejote y se necesita mucha agua para ello.
La cosecha de frijol avanza de manera uniforme en toda la zona frijolera del estado. Hay mucha floración y formación de ejote, pero es necesario que vuelva a llover de manera adecuada en el campo para asegurar una buena producción.
Así lo señaló Rubén Ibarra Alcántar, presidente estatal del Sistema Producto Frijol, tras indicar que las lluvias, hasta el momento, han sido favorables y regulares para la producción de frijol.
"Ha llovido tanto en Cuencamé como en Guadalupe Victoria, en Pánuco de Coronado y en otros municipios frijoleros. No han sido lluvias esporádicas, sino lluvias generales, y eso es bueno para todos", expuso.
Actualmente, la cosecha se encuentra en la etapa de floración y producción de ejote. Según el productor, los campos se ven "bonitos", con plantas de buen tamaño y abundantes flores.
Sin embargo, mencionó que esta es una etapa crítica de la cosecha, ya que el ejote está en formación y es crucial que vuelva a llover para humedecer la tierra y permitir que el ejote crezca completamente.
"Ya no necesitaríamos más agua después de una buena lluvia en estos días. Si eso sucede, no importaría que no lloviera más adelante", comentó.
En estos momentos, las tierras frijoleras llevan alrededor de dos semanas, o un poco más, sin lluvias, por lo que es urgente la presencia de precipitaciones en toda la región.
En octubre, después del día 10, comenzará el corte de las plantas, que se dejarán secar durante 10 días antes de proceder a la cosecha del frijol.
Por lo pronto, los productores de frijol se muestran optimistas con sus siembras, luego de que el año pasado no hubo producción, y en 2022 también enfrentaron dificultades. Este año, ven con agrado el desarrollo de sus cultivos.