Récord. Es la primera vez en toda su carrera como director técnico que Ruben Amorim pierde dos partidos de manera seguida.
EFE
En apenas tres días, dos derrotas seguidas y sobre todo el 2-3 de este sábado contra el Nottingham Forest en Old Trafford, cuestionan la reacción del Manchester United bajo el mando de Ruben Amorim.
El United cae de nuevo a posiciones menores de la tabla, hasta el decimotercer puesto, con diez puntos de renta sobre el descenso, pero también a ocho todavía de las plazas de la Liga de Campeones, que marca el Manchester City. El Forest, en cambio, es quinto, a dos puntos.
PRIMER TIEMPO
El United demostró carácter entonces. Instante a instante, desde el mismo momento que soportó el 0-1, ganó cada aspecto del juego, metro a metro, pase a pase. Su posesión era del 78 por ciento al cuarto de hora, apenas había dejado dar 36 pases a su rival. Era cuestión de tiempo el 1-1. Y lo fue.
En el minuto 17, Bruno Fernandes conectó con Manuel Ugarte, que combinó con el desmarque de Garnacho. Su remate fue contra el portero. El rechace lo anotó Rasmus Hojlund. Apenas es su quinto gol de la temporada.
SEGUNDO TIEMPO
Se veía venir el 1-2. Ocurrió al minuto y 58 segundos del segundo tiempo. Gol de Gibbs-White... O de Onana. El portero del United retrocedió un año atrás con un fallo tremendo. Ni siquiera lo había asumido aún el United cuando quedó de nuevo en evidencia su estructura defensiva.
Unos minutos después, un cómodo centro de Gibbs-White desde la derecha fue conectado de cabeza por Chris Wood. Su remate bombeado, hacia el otro poste, no acertó a despejarlo nadie; aún con el tanto de Bruno Fernandes poco después, no se pudo revertir el 3-2 a favor de los 'Tricky Trees'.