¿Por qué la gente llega de rodillas a la iglesia el 12 de diciembre?

Cada 12 de diciembre, mucha gente acostumbra a realizar un viaje no solo físico, sino espiritual, este consiste en caminar cierta distancia de rodillas de un punto hasta una iglesia donde se lleve acabo la celebración del Día de la Virgen de Guadalupe, a esto se le conoce como "pagar las mandas".

¿Qué es una manda?

Se considera como una promesa o voto que se hace a la Virgen de Guadalupe como una forma de pedir un favor, agradecer un milagro o cumplir una petición. Estas promesas pueden ser de diversa índole y se realizan con la esperanza de que la Virgen interceda ante Dios para conceder el deseo solicitado.

¿Por qué se hacen mandas?

Durante los años, la gente le ha dado diversos significado al pago de mandas, entre las que destacan:

• Petición de un milagro: Cuando alguien se encuentra en una situación difícil o necesita una ayuda especial, puede prometerle a la Virgen que realizará una determinada acción si su petición es concedida.
• Agradecer un favor: Si una persona considera que la Virgen ha intervenido en su vida para ayudarla a superar un problema o alcanzar una meta, puede hacer una manda como muestra de gratitud.
• Cumplir una promesa: Algunas mandas son el resultado de una promesa hecha en el pasado, que ahora se debe cumplir.

Otras formas de pagar

Dentro de la misma creencia sobre el "pago de mandas", hay diferentes formas de realizarlo, por lo que el caminar de rodillas es una de las muchas opciones, las siguientes más comunes son:

• Ayunar: Abstenerse de comer ciertos alimentos o de comer durante un período determinado.
• Recorrer largas distancias: muchas personas de las comunidades, optan por ir corriendo desde su municipio hasta el lugar donde se vaya a realizar la celebración de la Virgen.
• Realizar obras de caridad: Donar dinero, alimentos o ropa a personas necesitadas.
• Visitar un santuario: Además de la Basílica de Guadalupe, los peregrinos pueden visitar otros santuarios religiosos como parte de su manda.
• Realizar una peregrinación: Emprender un viaje a pie o en bicicleta a un lugar sagrado.