
Padres omisos, menores descuidados; reportan hasta 40 casos por semana en Durango
El reporte más frecuente ante la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, es por omisión de cuidados, ya que en Durango hay padres y madres que no asumen la responsabilidad que tienen en el cuidado de sus hijos, informó su titular Yadira Nohemi Domínguez.
“Seguimos con la misma incidencia, en cuestión de omisión de cuidados, es el reporte que más nos llega”, indicó.
Expuso que a la semana se reciben aproximadamente 40 reportes de este tipo, es decir, 160 casos al mes, lo que equivale a mil 920 casos al año, aproximadamente.
Sin embargo, durante la última semana se registró una reducción, al contabilizarse 30 reportes de omisión de cuidados.
Comentó que en el 70 por ciento de los casos se comprueba la omisión de cuidados, por lo que se inicia el procedimiento respectivo para reintegrar a los menores sus derechos.
“Primero se inicia con el reporte, se realiza una investigación por parte del equipo multidisciplinario, que es un abogado, un psicólogo y una trabajadora social. Ellos se constituyen en el domicilio, hacen sus investigaciones, acreditan el reporte y lo consiguiente es presentar una denuncia ante el agente del Ministerio Público con las investigaciones iniciales que nosotros ya realizamos y ya posteriormente Fiscalía comienza con sus siguientes investigaciones para acreditar los elementos del delito”, estableció.
Refirió que la omisión de cuidados se acredita cuando los menores no han sido registrados ante la oficina del Registro Civil, por lo que no tienen una identidad, y también cuando son niños que no reciben los cuidados que requieren o que habitan en una vivienda que no es adecuada para su pleno desarrollo. También hay casos en los que los menores han sufrido violencia física o psicológica, pero en estos casos ya se encuadra en el delito de violencia familiar.
En tal sentido, la Procuradora de atención a las infancias y adolescencias en la entidad, expuso que la omisión de cuidados escala a casos de violencia física y psicológica, así como delitos sexuales.
“Un 10 por ciento es de violencia física. Tenemos bebés desde un año, que les pegan, hasta niños y adolescentes de 17 años”, manifestó, por lo que se investiga para acreditar el delito.