Polémica por nuevo espacio deportivo
Debido a los inesperados hechos ocurridos recientemente en la cabecera, al colapsar la barda del frontón a consecuencia de los fuertes vientos registrados, la comunidad lamenta profundamente no contar con un espacio deportivo, sobre todo este que era de gran tradición y con una numerosa afición en la ciudad, donde chicos y grandes solían reunirse de mañana, tarde y noche a practicarlo.
Ahora, ante las ruinas de este venerado espacio, voces de los practicantes y ciudadanos comunes proponen soluciones para que las autoridades tanto municipales y estatales puedan hacer algo al respecto.
En la ciudad se cuenta con otras canchas, hacia el oriente, las cuales no están en buenas condiciones y sobre todo se dificulta su acceso por encontrarse en las afueras de la misma, señalan, por lo que no se usan. Los más prácticos sugieren que se puedan rehabilitar a fin de darles el uso correspondiente para lo que fueron pensadas y construidas.
La propuesta sobre el espacio que ocupaba el antiguo frontón, dicen algunos, es que se construya otra cancha, de primer nivel esta vez, con toda la reglamentación que determina este deporte del frontenis, en cuanto a la altura de las bardas y medidas, una opinión tradicionalista que valora el espacio que por mas de 40 años sirvió para una comunidad de frontenistas. Dada la necesidad de contar con más espacios para la atención a la ciudadanía a través de las diferentes dependencias municipales, se podría utilizar este espacio para oficinas, se propone también, ya que actualmente el Municipio debe alquilar lugares para albergar algunas direcciones e institutos que sirven a la ciudadanía.
Y el antiguo anhelo de otro sector de la ciudadanía, el cual se manifiesta a favor de la construcción en ese espacio, para un teatro del pueblo, un lugar para la cultura que tanto hace falta fomentar entre las nuevas generaciones.
Desde luego, los deportistas solicitan que se vuelva a construir el frontón, ahora modernizado. La polémica de cualquier manera está latente entre la ciudadanía. Finalmente, serán las autoridades en turno quienes opten por lo más conveniente para la población.