Valores de EU están en peligro: Obama
Barack Obama rompió ayer su silencio. El expresidente se declaró a favor de las multitudes que protestan estos días en las calles de Estados Unidos contra el veto del presidente Donald Trump a inmigrantes y refugiados procedentes de siete países de mayoría musulmana, y señaló que esta es la reacción deseable cuando están en peligro los valores norteamericanos.
En un comunicado, el expresidente demócrata cumple la promesa que lanzó pocos días antes de abandonar la Casa Blanca: intervenir en el debate público si veía amenazados algunos derechos fundamentales.
El republicano Trump ha transformado en diez días el papel del presidente de EU, e indirectamente el de los exmandatarios. Al abandonar el cargo, los presidentes solían retirarse a escribir y pintar, o se dedicaban a iniciativas filantrópicas. Raramente entraban en las discusiones políticas del día a día, y más raramente aún lo hacían para cuestionar a su sucesor.
El demócrata Obama decidió saltarse esta tradición que sí cumplió rigurosamente su predecesor, el republicano George W. Bush. El detonante fue la orden ejecutiva o decreto que Donald Trump firmó el viernes y que cierra temporalmente las fronteras a los refugiados e inmigrantes de países de mayoría musulmana. Decenas de miles de personas se concentraron durante el fin de semana en plazas y aeropuertos para protestar contra el decreto, cuestionado por su posible carácter discriminatorio e inconstitucional.
El comunicado, publicado por Kevin Lewis, un portavoz de Obama, es breve -contiene tres párrafos- y elegante -evita mencionar a Trump-, pero con cargas de profundidad sobre el nuevo presidente.
El comunicado termina rechazando por falsa la comparación, hecha por el propio Trump, de su decreto con medidas de la Administración de Obama para extremar el control de los refugiados procedentes de Irak durante unos meses en 2011. Y añade que "el presidente discrepa de la idea de discriminar a las personas por su fe o religión", una acusación implícita a Trump de discriminar a los musulmanes con sus decretos.