Perciben incumplimiento en la meta de acopio de frijol

Conforme a la percepción del dirigente de la Organización Agraria Popular (OAP), Sergio Silva Labrador, se incumplió la meta de acopio de frijol en las bodegas autorizadas por la Agencia de Servicios a la Comercialización y Desarrollo de Mercados Agropecuarios (Aserca), una vez que, extraoficialmente, se tiene conocimiento de que sólo se recibieron 18 mil toneladas, mientras que el objetivo era captar 36 mil toneladas.

"Sin confirmar, se habla de que sólo se acopiaron 18 mil toneladas de frijol, que es cuando mucho la mitad de la meta prevista. Podríamos decir, de alguna forma, que es como un fracaso del esquema por parte de Aserca y del Gobierno", opinó el entrevistado.

De la misma manera, añadió que la participación de los intermediarios (más conocidos como "coyotes") rebasó a las instituciones en el programa de comercialización, lo que atribuyó a que los productores agrícolas le perdieron la confianza y la credibilidad al Gobierno, debido a que sus esquemas, dijo, son burocráticos, lentos y su tramitología es excesiva, de tal manera que terminan desalentando a los campesinos.

Si los productores no encuentran opciones para vender su cosecha, subrayó el informante, entonces, no les queda más remedio que comercializar su grano a través de los esquemas oficiales.

Silva Labrador enfatizó que, en el reciente proceso de compra-venta de frijol, los más beneficiados fueron los "coyotes", quienes se llevaron la mayor parte de la cosecha del citado grano.

"Esto quiere decir que si el esquema acopió 18 mil toneladas, estamos hablando de una producción de las 75 mil u 80 mil toneladas de frijol. Realmente, los intermediarios rebasaron el esquema", ilustró el dirigente social.

No obstante, subrayó el titular de la OAP, el Gobierno Federal no puede adjudicarse el buen precio del frijol, que llegó a los 15.50 pesos por kilo, pues se debió a la participación de los 'coyotes', no por el esquema, ya que mediante éste se estuvo pagando siempre 50 centavos o un peso más barato que los intermediarios.

La demanda del frijol fue el factor, señaló, que obligó a las acopiadoras a ofrecerles un mejor precio a los campesinos que llevaron su grano a las empresas autorizadas por el Gobierno Federal a través de Aserca.