Anuncio de la presa Tunal II y la importancia del cuándo

Con gran alivio y satisfacción nos enteramos de que la presa Tunal II se encuentra entre los Proyectos Estratégicos del Plan Nacional Hídrico 2024-2030; en fechas recientes lo había asegurado la presidenta Claudia Sheinbaum y aparece en varios documentos con una inversión de 3,000 millones de pesos.

Primero habría que recordar que al proyecto de inversión se le llama de manera genérica presa Tunal II; sin embargo, se refiere a la presa y a las obras complementarias para tener la capacidad total de la planta potabilizadora, de la cual se construye una primera etapa de 27 millones de metros cúbicos anuales (hm3/año) y el proyecto recién anunciado incluye complementar a 84.7 hm3/año, o sea, falta el 68%.

La presa almacenará y aportará el agua requerida y la potabilizadora ajustará la calidad a la Norma Oficial Mexicana.

84.7 hm3/año es el volumen que se abastece actualmente mediante 97 pozos profundos a la ciudad, según el documento *EVALUACIÓN SOCIOECONÓMICA DEL PROYECTO: CONSTRUCCIÓN DE LA PLANTA POTABILIZADORA DURANGO Y OBRAS COMPLEMENTARIAS PARA ABASTECIMIENTO DE AGUA A LA CIUDAD DE DURANGO, DURANGO, publicado en la cartera de proyectos de inversión de la SHCP, en enero de 2024 por CAED Y Conagua, con información de AMD.

Con gran alivio porque actualmente, según el documento referido, basado en la NOM-127-SSA1-2021, Agua para uso y consumo humano. Límites permisibles de la calidad del agua, todos los pozos que abastecen a la ciudad de Durango se encuentran fuera del límite permisible en fluoruros (flúor). Igualmente todos, menos uno, se encuentran fuera en arsénico. Un resumen de los efectos nocivos a la salud está contenido en la Evaluación Socioeconómica. La noticia de la Tunal II nos genera una expectativa muy positiva, ya que será posible consumir agua sin esos elementos que dañan la salud.

Con satisfacción porque veremos cumplidos los compromisos y honrada la palabra por un lado de la presidenta Sheinbaum, quien lo ha referido en varias ocasiones como una promesa a los duranguenses y por el otro lado al cumplirse el largo afán del gobernador' Esteban Villegas, quien desde su periodo en el gobierno municipal lo viene persiguiendo y ahora está por concretarse, además en las mejores condiciones económicas y financieras para el estado y la ciudad ya que la inversión será 100% federal.

Conviene mencionar que la gestión de este proyecto requirió por lo menos 20 años y dice la historia, casi leyenda, que en el periodo presidencial de Luis Echeverría estuvo a punto de construirse, pero abandonaron el proyecto. Los actores actuales están por lograrlo.

Ahora, a lo que debemos estar atentos es a que lo necesario suceda, que se concrete paso a paso. Entre otros aspectos, es necesario que: tenga un registro en la Cartera de Proyectos de Inversión de la SHCP; tenga inversión programada en el Presupuesto de Egresos de la Federación.

De lo anterior, destaca la programación de la inversión ya que es una obra de largo aliento; para construirse transcurrirán entre tres y cuatro ejercicios presupuestales siempre que se invierta al ritmo que requiera la obra, es decir, sin detenerla o ralentizarla.

El tiempo en el que esté formalmente disponible el recurso económico y se cumpla la fase administrativa para lograr la contratación de las obras son los primeros pasos que pudieran llevar hasta nueve meses del calendario anual.

Luego, el primer trabajo importante será la obra de desvío del río; por lo menos pasarán tres ciclos de lluvias y el flujo del agua debe transitar de manera controlada.

Después, la obra de la presa requerirá trabajos complicados y especializados como la cimentación, probablemente el componente más importante. La construcción de la cortina es también una obra masiva con grandes volúmenes de obra; el tipo de cortina seleccionado es de concreto rodillado (compactado). Ese método constructivo evita en buena medida los riesgos de que grandes avenidas pudieran pasar sobre la cortina, aun si no estuviera concluida, sin causar daños significativos; a diferencia de las cortinas de materiales graduados como la de la presa Guadalupe Victoria, que si una avenida la desbordara pudiera resultar catastrófico. Estos trabajos requieren dos años y medio del calendario, en suma, con la parte administrativa inicial, más de tres años calendario y al menos tres años ejercicio presupuestal.

La potabilizadora puede construirse en un año calendario; por lo tanto no será la que defina el tiempo para entrar en operación.

El ritmo de la obra y sobre todo de la inversión lograrán que la presa se concluya en este periodo de los gobiernos estatal y federal, lo cual permitiría también que se les reconozca oportunamente su conclusión y recepción de los beneficios para la ciudad. Hasta ahora lo que hemos observado es una gran disposición de las partes. Esperamos que pronto sea realidad.

* El autor de esta colaboración es Presidente del Colegio de Ingenieros Industriales de Durango.

*https://www.secciones.hacienda.gob.mx/work/models/sci/cartera_publica/#/consulta/generales.